El desvío y el contrabando de diésel solo se solucionará con la focalización del subsidio, pero la decisión quedará en manos del próximo Gobierno

HECHO. Santos Alvite es ministro de Energía desde el 31 de octubre de 2022
HECHO. Santos Alvite es ministro de Energía desde el 31 de octubre de 2022

El Gobierno asegura que está examinando por dónde se fuga el diésel y que los cupos de venta al 10% de las gasolineras ayuda a un mejor control

Fernando Santos Alvite, ministro de Energía y Minas, explicó, durante una entrevista con LA HORA, que Petroecuador no está detrás de los desvíos de diésel subsidiado. El problema recae en las camaroneras, la minería ilegal y el gran contrabando.

Santos Alvite aseguró que el Gobierno no ha buscado sabotear inversiones como las del Campo Amistad.

¿Qué está pasando con el consumo y comercialización de diésel? ¿Quién está desviando el combustible subsidiado y beneficiándose de manera ilegal?

La raíz del problema es el precio subsidiado del diésel que en el Ecuador es subsidiado. Esto es una tentación para el mal uso.

En Ecuador, cuatro sectores deben pagar el diésel a precios internacionales: el sector industrial, las camaroneras de más de 500 hectáreas, las navieras y la venta en frontera.

Lamentablemente, el alto subsidio hace que se busquen subterfugios para comprar el combustible subsidiado.

Nosotros hemos detectado que, en 109 estaciones de servicio, de un total de 1.200, la venta de diésel aumentó 30% entre enero y mayo de 2023 (De 10 millones a 13 millones de galones al mes). Esto es demasiado frente a una economía que crece a menos del 3%.

Luego de que les quitaron el subsidio, se ha notado que grandes camaroneras dejaron de adquirir el diésel en los depósitos, pero siguieron funcionando. Entonces, la presunción es que están adquiriendo en algunas gasolineras.

También se ha visto que la actividad de minería ilegal en algunos sectores de la Amazonía ha ido de la mano del súbito incremento de las ventas de diésel en las estaciones de servicio.

Esto se está investigando a profundidad; además se ha puesto el ojo a gasolineras que venden más al sector pesquero cuando el volumen de pesca no se ha incrementado en la misma proporción.

¿La medida de establecer cupos es la solución? ¿No hay riesgo de desabastecimiento?

No existe ningún riesgo de desabastecimiento porque solo se afecta al 10% de las gasolineras del país. Se les despacha la misma cantidad de diésel que estaban consumiendo en 2022.

Con eso se busca evitar una pérdida de 3 millones al mes por desvíos o mal uso del diésel.

Sin embargo, la única solución de fondo es la focalización del subsidio. Actualmente, se está vendiendo a $1.75 por galón en el Ecuador, cuando el precio real de mercado es de $3,52. Eso es el doble.

Cualquier desvío es un gran perjuicio al país porque se venden en el país 100 millones al mes de diésel. El 70% de ese diésel es importado.

El problema más grave no es el desvío interno, sino el contrabando a barcos que pasan frente a las cosas ecuatorianas. Un barco puede pagar por un galón de diésel $4 o $5.

Algunos sectores pesqueros lamentablemente dicen que salen a pescar, pero realmente salen a pescar dólares vendiendo clandestinamente el combustible.

El tema de cupos es una advertencia a los gasolineros de que estamos siguiendo la pista; pero la medida de fondo es la focalización.

¿El Gobierno de Lasso piensa lanzar el proceso de focalización de combustibles antes de irse? ¿Es cierto que existe un cronograma para lanzar un decreto ejecutivo en septiembre de 2023?

Solo Ecuador, dentro de Sudamérica, tiene precios congelados y diferenciados para los combustibles. Pero en Colombia ha subido el precio; incluso Venezuela ha hecho lo mismo.

El proceso de focalización está dirigido desde el ministerio de Transporte y Obras Públicas; pero yo diría con toda sinceridad que el tema quedaría para el próximo Gobierno porque ya quedan pocos meses.

Estamos dejando varias soluciones; todas muy imaginativas y bien encaminadas. Nosotros no podemos tomar una decisión si los señores de la Conaie se levantaron de la mesa. Eso sería un riesgo.

Es cierto que la Agencia de Regulación y Control nos presentó un esquema para implementar el subsidio. Pero, lamentablemente, se establecía que el subsidio se mantenía para las dos terceras partes de los consumidores. Eso no es sensato porque debería dejarse el subsidio para una tercera parte.

Entiendo que los distribuidores de combustibles estén interesados en que avance el proceso porque además piden que se aumente su margen de comercialización.

¿Petroecuador no tiene responsabilidad en los desvíos de diésel? ¿Qué pasa con el aumento desproporcionado del consumo en el sector eléctrico?

No es un tema de Petroecuador. Los señores distribuidores de combustible han anotado una cifra que es cierta. Debido al estiaje 2022-2023, se utilizaron 50 millones de diésel para el sector eléctrico, frente a 5 millones que se habían utilizado el estiaje 2021-2022.

Un análisis del Centro Nacional de Control de la Energía (Cenace) ha justificado el aumento del consumo de diésel por la severidad de la época seca. No ha habido desvío al sector industrial.

El año pasado fue un estiaje que no se había visto en 15 años. Hubo que poner el parque termoeléctrico a todo lo que estaba disponible; y recibimos electricidad de Colombia.

Para este año, las previsiones iniciales apuntaban a un estiaje incluso más fuerte; pero las expectativas han mejorado en las últimas semanas.

El Cenace nos ha aconsejado que, en lugar de importar diésel que cuesta una fortuna, importemos gas natural que es mucho más barato. También se volvió a abrir la posibilidad de importar electricidad de Colombia.

¿Son ciertas las críticas de que no se ha licitado el campo amistad para favorecer a los importadores?

La voluntad del Gobierno para sacar la licitación del Campo Amistad ha existido desde el primer momento. El proceso se ha demorado por problemas ambientales y, además, la Corte Constitucional declaró inconstitucional la parte la reforma tributaria de 2021 donde se abría la posibilidad de firmar contratos de participación, que son más atractivos para los inversionistas.

No se ha buscado favorecer a los importadores. Quiero ser muy claro. Nadie importa gas en el Ecuador, solo Petroecuador.

Quien pide que se importe gas natural para la planta de Termomachala es el Cenace, que es una institución prestigiosa y científica.

Se ha creado un fantasma en el país. El importador de gas no existe; no hay nadie que importe gas porque no hay un mercado para eso.

 Se ha hecho una bola inmensa política sin ninguna razón. No se quiere favorecer a nadie. La licitación del Campo Amistad va a salir y soy optimista de que se va a producir suficiente gas para la planta de Machala y otras plantas.

Si se importa gas lo hará el Estado a pedido del Cenace. Mientras no salga gas del Campo Amistad, y se haga exploración en nuevos pozos, tomará hasta tres años.

Está solucionado un problema técnico para que la plataforma del campo Amistad se pueda usar para la importación.

No me parece que lleve a ninguna parte la creación de una especie de delincuente nuevo bajo el nombre de importador de gas natural.

¿ Por qué el Gobierno de Lasso no ha podido concretar las ambiciosas inversiones que tenía prevista y la meta de 1 millón de barriles en el sector de hidrocarburos?

Cuando la Corte Constitucional declaró que no es válido o no puede ponerse en vigencia el contrato de participación, el interés de los inversionistas bajó considerablemente.

El país ha explorado la mitad del oriente. Desde Lago Agrio, donde está la frontera con Colombia, y hasta el ITT hemos explorado y explotado. De ahí sale los 480.000 barriles que producimos al día.

Pero, desde el ITT hasta sur en el límite de la frontera con Perú, puede haber inmensas reservas. Hay muy buenos indicios.

No se va podido avanzar porque hay una hostilidad de la población a la industria petrolera; lo que no pasó en el nororiente. Habría que esperar una Ley de Consulta Previa para armonizar con las comunidades y que se permitan la exploración y producción petrolera.

El presidente Lasso sufrió el boicot de la Asamblea. Nunca le hubieran pasado una ley de consulta previa.

De los campos que ya están en producción, ¿Existe alguno con potencial de crecimiento e incluso que pueda compensar lo que se dejaría de generar en el ITT si gana el sí en la consulta popular?

El campo Sacha es quizá el de mayor potencial. Está produciendo 70,000 barriles; pero una compañía con técnica moderna de recuperación incremental de podría subir a 120.00 o 140.000 barriles por día. Para eso se necesitan decenas de miles de dólares que no tiene Petroecuador. Ojalá nosotros podamos por lo menos iniciar la licitación.

El Gobierno solo ha tenido dos años, pero reconozco que no se ha podido concretar todo lo previsto; pero la licitación del Campo Amistad va a concretarse y la ronda Intracampos II fue un éxito.

Además, estamos extendiendo los contratos que se van a vencer con la compañía Andes, que es la primera productora del país con casi 30.000 barriles por día. Le vamos a extender su contrato a cambio de nuevas inversiones.

Lo mismo con la compañía chilena Enap. También le vamos a permitir más exploración de riesgo incrementándole la tarifa por barril

No se logró el objetivo del millón de barriles, lamentablemente, pero se ha estabilizado la producción 480,000 al día.

 Quiero dejar como conclusión que el país es rico en petróleo. El Suroriente puede tener inmensas reservas. El mismo nororiente puede producir muchísimo con una campaña adicional de exploración con técnicas de recuperación mejorada.

El problema es el monopolio estatal de Petroecuador, que depende del dinero que le dé el ministerio de Economía.

Además, el país todavía no se ha podido recuperar del descrédito que provocó Correa cuando botó a lagunas compañías petroleras del país en 2010.

Si replanteamos el esquema; abrimos al Ecuador sinceramente bajo un contrato de participación, y atraemos a las compañías dándoles un marco de seguridad, Ecuador puede producir muchísimo más petróleo.

Ni de lejos se ha acabado el petróleo. En el país tenemos muchísimo más pero el petróleo fácil ya salió; hoy es un petróleo más costoso de producir necesita más técnica que no la tiene la empresa estatal.

¿Cuál es el legado que deja el Gobierno de Lasso en el sector de los hidrocarburos?

Yo diría que borró la pésima imagen que dejó el presidente Correa. En esa época, el mundo creyó que el Ecuador se aislaba a la inversión y se salía del mapa petrolero.

Lasso ha vuelto a poner al país en el mapa. El mundo conoce que tenemos reservas y estamos abiertos a la inversión; incluso nos volvieron a invitar a ser parte de la OPEP.

Será cuestión del próximo gobierno aprovechar esas condiciones. Seha sembrado. Ojalá venga alguien que coseche bien. (JS)