El país está desperdiciando el potencial del Campo Amistad mientras se sigue importando gas y diésel caros

PERSONAJE. Jorge Luis Hidalgo considera que existe un estatus quo que beneficia a los importadores.
PERSONAJE. Jorge Luis Hidalgo considera que existe un estatus quo que beneficia a los importadores.

Las importaciones de gas sumaron al menos $1.000 millones en 2022, mientras la producción nacional está en mínimos y los proyectos importantes no se licitan.

Ecuador importa alrededor de 14 millones de barriles de Gas Licuado de Petróleo (GLP) cada año. Esto representa un costo de al menos $1.000 millones anuales o más de $83 millones mensuales.

Este costo podría reducirse de manera sustancial si se impulsa la producción nacional del Campo Amistad, el cual está ubicado en el mar, frente a las provincias de El Oro y Guayas. Este campo tiene un enorme potencial de producción de gas natural. Esto abarataría los costos y reduciría sensiblemente las caras importaciones de GLP.

Actualmente, el Campo Amistad produce 20 millones de pies cúbicos al día de gas. Con las adecuadas inversiones y a mediano plazo se podría llegar a 100 millones de pies cúbicos al día (4 veces más), según estudios de Petroecuador. El potencial a largo plazo multiplicaría por 10 la producción.

El resultado sería un ahorro sustancial en importaciones de GLP y diésel e incluso menos gasto en subsidio a los combustibles.

Esto debido a que el gas natural producido en el país es 40% más económico que el gas natural importado. Además, es 70% más económico que el GLP y el diésel importado.

En las actuales circunstancias, al país le cuesta entre $15 y $20 importar gas suficiente para llenar cada cilindro, que luego se vende a menos de $2 en el mercado interno.

Los estudios técnicos para licitar el Campo Amistad están listos hace cinco años; pero incluso en el Gobierno del presidente Guillermo Lasso se ha aplazado el proceso en varias ocasiones.

En entrevista con LA HORA, Jorge Luis Hidalgo, gerente mánager de GreenPower Internacional y consultor empresarial, explica lo que impide que se aproveche el potencial del Campo Amistad.

P. ¿Es cierto el argumento esgrimido por el actual Ministro de Energía respecto a que el Campo Amistad no se ha podido desarrollar por falta de interés de potenciales inversionistas?

No, eso no es cierto. En noviembre de 2021, durante el Ecuador Open for Business se lanzó el proyecto. En abril de 2022, el presidente Lasso visitó el campo y, en julio de ese año, se pidieron cartas de interés a potenciales inversionistas. No se presentó una, sino veinticinco cartas de interés para licitar el Campo Amistad. Se tienen suficientes estudios, pero a la fecha ya son 270 días de retraso en el proceso, porque no les interesa. El mismo destino han tenido procesos como el de aprovechamiento del gas en mecheros de la Amazonía. Lo que sí ha avanzado enormemente son las intenciones de aumentar las importaciones de gas.

P. ¿Existe un estatus quo de importadores, que tiene grandes ganancias, detrás del fracaso en concretar la licitación de proyectos como el Campo Amistad?

En Ecuador hay un estatus quo clarísimo que trabaja, se esfuerza y beneficia a los importadores de combustibles. El único sector que ha crecido en estos dos años ha sido el de los importadores de combustibles. En 2022 se importó $7.646 millones. De ese total, al menos $1.000 millones se fueron al GLP. Estamos importando cerca del 80% de combustibles y en GLP llegamos casi al 87%. ¿Por qué le digo que hay un estatus que defiende a los importadores? Porque todo proyecto que promueve la producción nacional de energías termina siendo boicoteado. El ejemplo es el Campo Amistad. No se han hecho las inversiones necesarias para aprovechar la producción nacional. Ahora el Gobierno piensa emitir un decreto ejecutivo para declarar en emergencia al sector eléctrico, bajo la amenaza de apagones, con el fin de viabilizar más importación de gas.

P. ¿Por qué las nuevas importaciones de gas que se quieren impulsar con un decreto ejecutivo son un mal negocio para el país?

 Lo que quieren proponer es que se traiga una generación de barcazas de 300 megavatios y se importe gas natural para este año. Eso está en el borrador de decreto ejecutivo al que he tenido acceso. Esa generación eléctrica nos va a costar entre 30 y 50 centavos por kilovatio/hora. Esto es recontra caro. Además, en contra de informes técnicos que recomiendan lo contrario, se busca utilizar las facilidades del Campo Amistad para las importaciones de gas.Se han pasado por encima de las directrices del Presidente de la República, porque de otra manera ya se habría licitado el Campo Amistad, y no se tendría la  amenaza de importar gas caro para evitar apagones en la época de estiaje. Lo mismo pasa con el gas de mecheros. Ecuador quema más que países como Qatar, Brasil o Canadá. Tenemos, desde 1985, una planta que capta gas de mecheros y lo industrializa para sacar GLP. Pero, esa planta trabaja a media capacidad mientras importamos GLP y gas natural.

P. ¿Cuánta capacidad de producción de gas natural estamos perdiendo en medio de tantos intereses creados?

Perú produce 1.800 millones de pies cúbicos de gas natural al día; Colombia produce 1.300 millones de pies cúbicos. En cambio, nosotros llegamos a 20 millones al día. Esto no es casual. Nos meten el cuento que nadie quiere invertir en Ecuador, cuando hay 25 cartas de interés. Nos ponen toda clase de pretextos para boicotear la licitación de Campo Amistad porque lo que se quiere es asegurar el negocio de la importación. El estatus quo de los importadores lleva décadas. En los últimos 15 años, la importación de combustibles sobrepasa los $62.000 millones. Obviamente, el negocio es multimillonario. Ahora se busca impedir que se aproveche el potencial del Campo Amistad. El propio gerente de Petroecuador había anunciado que el 21 de julio se iba a reunir el Directorio para aprobar la licitación de Campo Amistad; pero no se concretó nada. (JS)