Informalidad, migración y corrupción: retos comunes en Ecuador y Ucrania

HECHO. Antes de la guerra, Ucrania ya era la economía más pobre de la Unión Europea.
HECHO. Antes de la guerra, Ucrania ya era la economía más pobre de la Unión Europea.

El 4% del PIB ecuatoriano se sustenta en los migrantes; mientras en Ucrania llega a más del 12% del PIB. La corrupción genera pérdidas de $2.500 millones en Ecuador y hasta más de $6.000 millones en Ucrania.

Durante los últimos días, en medio de la controversia sobre los estudiantes ecuatorianos que no quieren regresar al país, se han lanzado afirmaciones como que incluso “una Ucrania en guerra es mejor que Ecuador”.

La economía nacional tiene muchos problemas. Las oportunidades laborales son escasas y los sueldos bajos; pero Lorena Vergara, economista, comentó que es injusto decir sin más que estamos peor que una de las sociedades más pobres de Europa.

“Ya antes de la guerra, Ucrania ya era una de las economías más pobres y corruptas dentro de la exrepúblicas soviéticas. Los niveles de informalidad y ingreso por habitante incluso son mayores que en Ecuador”, dijo

Andrés Beltrán, economista y sociólogo, puntualizó que, con una población de 44 millones de personas (más del doble que la ecuatoriana) tienen un ingreso por habitante o Producto Interno Bruto (PIB) per cápita de $3.724,9 anuales.

En Ecuador, luego del retroceso producido por la pandemia, el PIB per cápita es de más de $6.200 al año.

Ucrania tiene mayores fuentes de minerales y poseen una tierra súper fértil llamada “chernozem” o tierra negra; pero tiene menos personas con patrimonio de $1 millón o más que Ecuador”.

Según el último reporte de riqueza del Banco Credit Suisse, Ecuador tiene 11.361 adultos con patrimonio mayor a $1 millón; mientras en Ucrania, el número no supera los 6.800.

Casi el 90% de la riqueza ucraniana está en manos de los llamados oligarcas, que han hecho fortuna con negocios turbios gracias a sus vinculaciones políticas.

Informalidad y migración

Ecuador tiene un persistente problema de informalidad. Según el último reporte del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), alrededor del 63% de la Población Económicamente Activa (PEA), es decir 5,2 millones de personas, sobrevive entre el subempleo y la informalidad.

En comparación, la economía ucraniana tiene niveles de informalidad que rondan el 75%, con un fuerte componente de migración. Cada año, más de 10 millones de ucranianos (más del 22% de la población) salen de su país para trabajar al menos unos meses en sectores como el de la construcción en Polonia, República Checa, entre otros.

El 12% del PIB de Ucrania se debe a las remesas de esos migrantes, lo que representa alrededor de $19.000 millones al año.

En el caso de la economía ecuatoriana, las remesas sufrieron un repunte con la pandemia y cerraron 2021 en alrededor de $4.000 millones. Ese monto representa el 4% del PIB nacional.

Pamela Ordóñez, ecuatoriana que realizó estudios en Ucrania hace cinco años, comentó que la migración en ambos países ha sido un desfogue frente a la falta de oportunidades y la crisis económica; pero en la economía ucraniana es un fenómeno masivo y sub registrado.

“Hace años ya se hablaba de que hay muchos más migrantes de lo que dicen las fuentes oficiales. La economía ilegal sustenta gran parte de la vida de las personas en ese país”, puntualizó.

La corrupción es un mal compartido

En Ecuador, todos los años se destapan casos de corrupción en entidades públicas como el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), Petroecuador, aduanas, entre otros. Esa es una de las principales trabas para el desarrollo del Ecuador. Según estimaciones de organismos internacionales, le cuestan al país alrededor del 2,5% del PIB cada año.

Por su parte, en Ucrania, de la mano de una inconclusa transición desde el comunismo al capitalismo, todavía existen más de 3.600 empresas estatales con problemas de corrupción en su mayoría.

Por ejemplo, en la empresa más grande del país, Naftogaz, la corrupción ha llegado a representar pérdidas equivalentes al 6% del PIB ucraniano.

Asimismo, hasta hace pocos meses (julio 2021) se mantenía la prohibición en la compraventa de tierra agrícolas. Esa prohibición protegía los negocios de 25 terratenientes que acaparan más del 90% de las extensiones cultivables.

Esa realidad ha provocado que, a pesar de tener la famosa tierra negra o chernozem, la productividad por hectárea sea de la mitad de la de Estados Unidos; y esté a la par de la pequeña producción ecuatoriana.

La corrupción también le quita competitiva y productividad a la producción aeroespacial, que es una de las pocas de valor agregado en Ucrania. (JS)

La Antonov An-225, que es la aeronave más grande del mundo, es fabricada en Ucrania. Ese país es uno de los 9 en el mundo con toda la cadena de producción aeroespacial.
Hasta 2013, el principal socio comercial de Ucrania era Rusia. En 2014, el Gobierno ucraniano quiso firma un acuerdo de comercio con la Unión Europea, pero Putin se opuso.
Una carrera universitaria como medicina pueden costar la mitad en Ucrania en comparación a Ecuador. Actualmente, $10.000 equivalen a 297.000 grivna ucraniano.
Las principales exportaciones de Ucrania son maíz, aceite de girasol, trigo, algodón y minerales como el hierro. En el caso de Ecuador está el camarón, banano, conservas de pescado, flores y petróleo.

Ucrania tuvo un fallido proceso de privatización de empresas estatales

Hacia el fin del comunismo, la mayoría de los Gobiernos de repúblicas ex soviéticas calcularon el valor de todas sus empresas estatales y lo dividieron en vales. Esos vales fueron vendidos a los ciudadanos a un precio moderado. Por ejemplo, el 80% de los checos compraron alguno de esos papeles que más tarde se pudieron cambiar por acciones de las empresas privatizadas.

En Ucrania, también se emitieron vales, pero esos papeles se mantuvieron sin valor por años porque no se concretaba el paso de las empresas estatales al sector privado.

 Mientras todo se dilataba llegaron empresarios con vínculos políticos a comprar esos vales a una fracción de lo que les costó a los ciudadanos.

Cuando ya habían comprado todos los papeles, de repente se reactivó el proceso de privatización y esos empresarios se hicieron con el manejo de los negocios más rentables a precio de nada.

Así, por ejemplo, es como nació el grupo Roshen, que es el principal fabricante de dulces de Ucrania. El dueño de ese grupo, Petro Porosehnko, incluso llegó a ser presidente de la nación, antes del actual primer mandatario, Volodímir Zelenski.