La petrolera estatal tiene múltiples problemas estructurales para gestionar más de $16.000 millones en activos. Su reestructuración es vital para optimizar el gasto estatal.
El Gobierno de Daniel Noboa repite constantemente que está comprometido con reducir en $1.000 millones el gasto público. Sin embargo, hasta el momento no existe un plan claro para hacerlo y se acumulan anuncios sobre optimizar las empresas públicas o reducir contratos ocasionales, entre otros temas.
El ministro de Economía, Juan Carlos Vega Malo, dijo hace pocos días dijo que se busca tomar “medidas muy drásticas” para convertir a Petroecuador en una empresa de clase mundial.
Pero no se explica que se quiere decir con esto y solo se ha hablado de temas como restringir el uso del avión que tiene la petrolera estatal. “Estos temas aportan, pero son mínimos frente a las ineficiencias y los problemas estructurales de Petroecuador”, explicó Carlos Arévalo, ingeniero petrolero.
Gigante de mil cabezas
Según información de la plataforma de transparencia financiera de las empresas públicas, Petroecuador tiene que administrar y operar $16.488 millones en activos. Esto incluye oleoductos, refinerías, campos petroleros, estaciones de almacenamiento, entre otros.
Para su operación, se necesitaron más de $4.300 millones anuales hasta 2023; pero a inicios de 2024 se anunció que se adelantan procesos para que la petrolera estatal también asuma el control del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP), que estuvo en manos privadas por 20 años.
“Petroecuador ya es un gigante de mil cabezas y ahora se le añade una más cuando se necesita optimizar costos en medio de la crisis fiscal. Existen ineficiencias notorias en temas como la importación de derivados (gasolinas), la producción petrolera, las refinerías, pero todos los Gobiernos lo que han hecho es poner parches”, dijo Arévalo.
En marzo de 2022, LA HORA ya analizó, por ejemplo, que el 82% de la gasolina súper importada se utiliza para hacer combustible de menor calidad. Ahí se deben tomar medidas para reducir costos.
Desde los distribuidores de combustibles se ha denunciado, en múltiples ocasiones, que existen ineficiencias y zonas oscuras en el manejo y despachos de derivados de petróleo desde Petroecuador.
El cierre del ITT
Noboa ha dicho que se necesitaría una moratoria de al menos un año más para seguir operando el bloque ITT, que según el dictamen de la Corte Constitucional (CC) y la última consulta popular debe cerrar operaciones desde el 31 de agosto de 2024.
Para eso solo hay dos vías, o una nueva consulta popular donde la mayoría de los ecuatorianos den más plazo para el cierre, o un alcance de la CC que permita seguir explotando por un tiempo más.
Se necesitan informes técnicos y un plan para que cualquiera de esas vías sea posible. Sin embargo, ante requerimiento de LA HORA, tanto el Ministerio de Energía como Petroecuador no han respondido sobre si realmente existe este plan a menos de un mes de que el Gobierno entregue el Presupuesto General del Estado (PGE) para 2024 a la Asamblea.
Sin la producción del ITT durante gran parte del año, el Banco Central ha proyectado una producción total de 172 millones de barriles anuales, o alrededor de 471.200 barriles al día. Actualmente, la producción diaria llega a 491.844 barriles.
Sin una estrategia clara sobre qué hacer con el ITT, la pregunta es cómo sería posible lo dicho por la ministra de Energía y Minas, Andrea Arrobo, durante una entrevista radial: “La transformación no va a ser de la noche a la mañana, pero para el aumento de la producción tenemos una previsión para 3 y 6 meses y para 1 año. No quisiera aventurar a generar una expectativa muy alta, pero al menos tenemos que llegar a 520.000 barriles de petróleo”,
Petroecuador no respondió, hasta el cierre de esta edición, sobre la estrategia para llegar a ese nivel de producción, tomando en cuenta la pérdida del cuarto campo petrolero más productivo (ITT) y la falta de dinero para las inversiones que se necesitan para generar más barriles en el resto de los campos.
¿Qué pasará con los subsidios?
El presidente Noboa, durante dos entrevistas sucesivas en esta semana, ha tenido posiciones contradictorias sobre el subsidio a los combustibles, que se come buena parte de los ingresos estatales.
En Teleamazonas aseguró que la focalización sería un paso posterior al incremento de la eficiencia energética. Incluso, habló de grandes inversiones para refinación y transmisión y distribución eléctrica. En este último punto, se habla de montos de más de $500 millones.
En una entrevista con La Posta, en cambio, recalcó que se debe hacer una focalización inteligente. Una reducción de subsidio en un 25%. Es decir, en $1.000 millones sería, de acuerdo con el presidente, algo sensato, aliviaría en algo al Estado y no afectaría mayormente al pueblo.
Para Paúl Rodríguez, ingeniero petrolero, las múltiples declaraciones sobre los subsidios delatan la falta de un plan. “Existen ya suficientes diagnósticos e incluso propuestas para focalizar los subsidios. Si no se hace rápido, de dónde saldrá el dinero para invertir en Petroecuador y cubrir la no explotación del ITT”, puntualizó.
Por su parte, Alberto Acosta Burneo, economista y editor de Análisis Semanal, ha repetido en múltiples ocasiones que se pierde tiempo y dinero en busca la “solución perfecta” para la focalización cuando existen alternativas efectivas a la mano. (JS)
Durante el Gobierno de Guillermo Lasso, Petroecuador tuvo 8 diferentes gerentes en menos de tres años. Con Daniel Noboa ya se han tenido dos gerentes.
La optimización de la nómina quedó en nada
El exministro de Economía, Mauricio Pozo, ha recordado que quedó a medias el proceso que, en 2020, establecía la fusión entre Petroecuador y Petroamazonas a través de un decreto ejecutivo.
“Ese proceso se inició, se armó un esquema y después por decisión de algún juez quedó en el aire. Eso era 10.000 personas que estaban entre las dos instituciones y que se iba a optimizar para quedar en 6.000 empleados. Ahora se tienen las mismas 10.000 personas. No se hizo nada”, recalcó.
Un reciente informe del Observatorio del Gasto Público incluso habla de “al menos 43 trabajadores de Petroecuador que, sin ser altos cargos, ganan entre $5.131 y “$6.120.
Además, Pozo reconoció que también se deben hacer cambios radicales en los procesos de compra de insumos y comerciales en general, entre otros.
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