Dejar de explotar el ITT generará pérdidas netas de más de $14.000 millones y menos crecimiento económico, según el Banco Central

A través de un nuevo estudio, el Banco Central establece impactos directos como empleos perdidos, menos dinero para obra pública e incluso una reducción del PIB per cápita o ingreso por ecuatoriano. Todo esto como consecuencia de dejar de explotar el bloque petrolero ITT.

Este próximo 20 de agosto de 2023, junto con las papeletas para elegir binomio presidencial y asambleístas, también se tendrá dos papeletas adicionales para decidir si se deja de explotar el bloque petrolero ITT y se prohíbe la minería en el Chocó Andino (consulta popular solo para Quito).

En este contexto, el Banco Central del Ecuador (BCE) acaba de publicar un estudio, titulado «Impactos macroeconómicos de mantener el crudo del ITT indefinidamente en el subsuelo».

A continuación, se detallan los principales impactos determinados y su afectación directa al empleo, el crecimiento económico, los ingresos fiscales y de los ciudadanos:

1.-  Según estimaciones de Petroecuador, se espera que el cese de operaciones en el} Bloque 43-ITT implique un costo de oportunidad en el volumen de extracción de petróleo de 281,8 millones de barriles entre 2023-2043.

Esta disminución en la producción petrolera conllevaría a que se deje de percibir ingresos brutos por $17.634,5 millones.

2.-  Si se descuentan los montos esperados por inversiones y costos y las deducciones por la Ley Amazónica y Ley 40, el Estado dejaría de percibir recursos por concepto del rendimiento petrolero por $12.039,0 millones.

Si a esto se suman los costos de abandono de los campos, compensaciones sociales y las pérdidas asociadas a las
inversiones realizadas, el costo de oportunidad asciende a $14.709,0 millones en 20 años. Es decir, más de $735 millones anuales

3.-  En 2023 se esperaría una reducción en las exportaciones petroleras de $452 millones51 por el cese de operaciones en el Bloque 43-ITT en el último trimestre de este año.

La pérdida de exportaciones alcanzaría los $1.103 millones en 2026; y sumaría los $3.698 millones en los siguientes años.

4.- La no explotación del ITT significaría una disminución de las Reservas Internacionales de $452 millones en el último trimestre de 2023 y de $1.268 millones en 2024, totalizando un efecto total negativo de $1.720 millones en dos años.

5.-  El cese de operaciones del ITT generaría reducciones considerables en las arcas fiscales del país. Entre 2023 y 2026, el Sector Público No Financiero dejaría de percibir $3.500 millones por concepto de ingresos petroleros.

Por el lado del gasto, se tendría una reducción de $1.224 millones que correspondería al gasto de inversión asociado a las operaciones en el Bloque 43-ITT, que ya no se ejecutaría.

El impacto en las finanzas públicas se traduciría en un déficit adicional de $2.275 millones.

6.- Dentro Sector Público No Financiero, el Gobierno Central (incluye al Presupuesto General del Estado) será el agente económico que registre la mayor afectación en sus finanzas, dado que su resultado deficitario estimado incrementaría en $1.799 millones

Es importante señalar que los ingresos petroleros financian la inversión pública en salud, educación y seguridad, entre los principales; así también, los gobiernos locales y las universidades participan del 10% de los ingresos petroleros.

Por lo tanto, la finalización de las operaciones en el Bloque 43-ITT se traduciría en reducciones en las preasignaciones en los presupuestos de las entidades mencionadas y en el gasto de inversión que se establecería en el Presupuesto General del Estado.

7.-  En 2023, la no explotación del  ITT reduciría la previsión de crecimiento de la economía ecuatoriana en 0,7 puntos porcentuales. Es decir, se pasaría de 2,6% a 1,9% de crecimiento del PIB.

Por su parte, en 2024 se presentaría la mayor reducción en la tasa de crecimiento del PIB, 0,8 puntos porcentuales  es decir, la tasa de crecimiento sería de 1,7%.

Esto se explica debido a la disminución esperada en la producción de petróleo de 4,6% respecto al año previo Adicionalmente, en este año, se espera la mayor disminución de la inversión pública ($400 millones).

Se espera una reducción en el crecimiento del PIB en 1,9 puntos porcentuales para el período 2023-2026.

8.-  Las disminuciones en las tasas de crecimiento del PIB se reflejarían en menores niveles de bienestar para la población en el mediano plazo.

Así, por ejemplo, el PIB per cápita, o el ingreso por ecuatoriano, se reducirá $29,4 en 2023 hasta
$82,9 en 2026, con una reducción promedio del ingreso mensual de $6,9 para cada ecuatoriano.

9.-  Para 2023, se espera un aumento de 30.693 personas en situación de desempleo. El incremento del desempleo, de la mano del menor crecimiento económico, será de 31.688 en 2024 y 44.717 en 2025

10.- Finalmente, se proyecta una reducción del 3,2% en el aporte de los ingresos petroleros para políticas de ayuda social contra la pobreza. (JS)

Para revisar el estudio completo del Banco Central del Ecuador, se puede acceder a este enlace.

Cinco errores del discurso a favor de dejar de explotar el ITT y prohibir la minería