‘Este último año se ha tenido un cambio normativo y regulatorio histórico para fomentar la transformación digital en el Ecuador’: Gisela Montalvo

PERSONAJE. Gisela Montalvo dirige con dinamismo el gremio de la innovación y la tecnología.
PERSONAJE. Gisela Montalvo dirige con dinamismo el gremio de la innovación y la tecnología.

El país sí ha avanzado en el desarrollo de su ecosistema digital. Al menos cinco reformas legales abren un amplio abanico de oportunidades de desarrollo.

Gisela Montalvo, directora ejecutiva de la Cámara de Innovación y Tecnología Ecuatoriana (Citec), ve con optimismo los recientes cambios normativos como la Ley Fintech, la Ley de Transformación Digital, entre otros.

Sostiene que las empresas ecuatorianas están listas para afrontar el desafío, pero aclara que se necesita también un cambio cultural de los ecuatorianos.

P. ¿Se ha avanzado en el fomento de la transformación digital del Ecuador? ¿Qué cambios importantes se han dado en este sentido?

Este último año el país ha tenido un cambio normativo y regulatorio histórico para fomentar la transformación digital. El primer hito es la Ley Fintech, porque nos abre las puertas a la inclusión financiera digital y a todos los servicios digitales financieros que se puedan dar a través de las Fintech.

Además, se eliminó el artículo 146 del Código Ingenios, en el cual se establecía la localización forzada de datos. Esta eliminación es la primera puerta de entrada para los servicios en la nube y para que compañías referentes internacionales vengan a ofrecer sus servicios en Ecuador.

El segundo hito es la Ley Orgánica de Transformación Digital y su reglamento, que representaron un antes y un después en el marco normativo de incentivos, sobre todo para que el sector público genere un gobierno digital. Se autoriza el uso de herramientas tecnológicas innovadoras.

El tercer hito es la eliminación, dentro de la Ley de Economía Familiar aprobada como decreto por la Corte Constitucional, de las retenciones a micro comercios por pagos digitales. Esto significa que podemos incentivar la inclusión financiera digital. Además, te permite, no solo el crecimiento del sector porque se amplían las opciones de pago seguros para los usuarios o clientes de los micro comercios, sino también fomenta un tema de regularización del comercio nacional a través de incentivos tecnológicos.

P. Además de estos tres grandes cambios, ¿qué otras reformas de normativa secundaria han sido decisivas para abrir las oportunidades tecnológicas en el país?

Con la reciente reforma al Acuerdo Ministerial 141, se abre la puerta para que se puedan contratar tecnologías emergentes en las instituciones públicas como blockchain, Big Data, internet de las cosas, inteligencia artificial y cualquiera de las herramientas y servicios tecnológicos disponibles. Ya no se exige que el proveedor sea una empresa pública de telecomunicaciones; sino que puede participar cualquier empresa privada.

Es una gran oportunidad para nuestras industrias porque podemos ser oferentes para el sector público con herramientas innovadoras tecnológicas y en las alianzas que se necesiten.

También es un incentivo para que empresas internacionales grandes busquen alianzas con empresas locales. Un Google, un Amazon, un Oracle no ofrecen los servicios directamente, sino que necesitan socios locales. No solo es un crecimiento para nuestro sector, sino que es una real oportunidad de mejoría de los servicios, sobre todo públicos, y de tener menores costos para los usuarios.

Otra reforma importante, a través de Acuerdo Ministerial, permite que la información en el sector público no esté obligatoriamente en servidores, sino que se pueda utilizar la tecnología en la nube. Eso te permite escalabilidad para adaptarse a las necesidades cambiantes de los usuarios y disponibilidad continua más allá de que exista o no internet.

En temas de ciberseguridad, el tener información en la nube va a permitir que exista una mejora en las características de seguridad de los servicios y la información pública. Asimismo, nos permitirá un mejor aprovechamiento de los datos para tomar mejores decisiones desde el Gobierno y el sector público.

P. ¿El ecosistema tecnológico nacional está preparado para aprovechar las oportunidades que surgen de los cambios normativos?

Como empresas estamos listos y preparados. Nuestros servicios de hecho son muy reconocidos a nivel internacional. Estamos listos para las alianzas con reconocidas empresas internacionales. Ecuador tiene varios casos de éxito de compañías tecnológicas con capacidad para asumir el reto.

Por otro lado, el mayor desafío es el tema cultural. Debemos pensar cómo fortalecemos la educación digital, cómo logramos que la gente confíe mucho más en los servicios digitales.

Además, se debe capacitar a los servidores públicos para que estén preparados para gestionar la contratación y las nuevas herramientas tecnológicas. El Ministerio de Telecomunicaciones está trabajando en una política pública para impulsar el cambio cultural. La base inicial para este cambio cultural es que la pandemia hizo que la mayoría de la población haya utilizado plataformas digitales y redes sociales.

P. ¿Puede ser un freno el hecho de que en Ecuador existe un déficit de profesionales especializados en tecnología?

Nuestros profesionales en tecnología están reconocidos a nivel internacional por su nivel de formación y habilidades blandas como liderazgo. La brecha entre la oferta y la demanda de profesionales no solo ocurre en Ecuador, sino que es mundial.

Lamentablemente, la cantidad de nuevos profesionales no crece al mismo ritmo que está creciendo la industria de tecnología. El Foro Económico Mundial dice que hay un 40% de brecha entre la oferta y la demanda. Lo que se debe hacer es fomentar modelos innovadores de formación profesional: programas cortos, titulación en institutos tecnológicos, modelos de bootcamp donde en cuatro o seis meses se aprende lo que tomaría dos años.

Tenemos que democratizar y hacer masivo el conocimiento. Desde la Cámara tenemos, en alianza con nuestros socios, cursos y programas gratuitos. Estamos trabajando, de la mano con el Ministerio de Educación, en la reforma de la malla curricular. La meta es que se incluyan materias de pensamiento computacional. No significa que sepan usar la computadora, sino fomentar el pensamiento crítico en los niños, y lograr que la formación ya no sea memorística o estática.

Los analistas dicen que no necesariamente van a desaparecer muchas carreras, pero lo que sí va a pasar es que ya no van a existir carreras en que no se incorporen habilidades digitales. (JS)

 Se prevé que el sector tecnológico ecuatoriano crezca entre 7% y 8% anual hasta 2025.
El sector servicios, incluido el tecnológico, es uno de los que más empleo formal y con afiliación al IESS genera.