Niños con cáncer tienen que viajar a otras ciudades para ser atendidos

33 niños con cáncer de Tungurahua reciben su tratamiento en Solca Quito.
Atención. 33 niños con cáncer de Tungurahua reciben su tratamiento en Solca Quito.

Wilson fue diagnosticado con leucemia linfática aguda a los 10 años, cada semana tiene que viajar a Quito para recibir quimioterapia en el Hospital de Solca.

“Tengo que llevarle lejos porque aquí en Ambato no hay oncología en pediatría”, dijo Sonia Chicaiza, madre de Wilson, ambos oriundos de Píllaro.

Los viajes que realizan inician a la madrugada, los gastos en cada traslado superan los 50 dólares en alimentación y medicinas.

“Hay días en los que hay que hacer viajes de emergencia porque mi hijo se pone mal y solo ahí (Solca Quito) le pueden atender bien”, contó la madre.

Sonia dice que hay días en los que no come para horrar dinero y poder seguir con el tratamiento de Wilson, según el diagnóstico médico, su hijo, que ahora tiene 12 años, deberá recibir quimioterapia por más de un año.

 

EL DATO
El voluntariado tiene sus oficinas 
en el hospital de Solca en Izamba.

 

Esperanza

Otro caso similar es el de Aarón, quien tiene leucemia y actualmente viaja cada 15 días a Solca Quito.

Su madre Andrea Páez cuenta que durante los primeros meses de la enfermedad tuvieron que vivir en la capital del país para no descuidar el tratamiento.

“Cuando mi hijo fue diagnosticado con cáncer recorrimos todo Ambato: hospitales, centros de salud, clínicas privadas y no hay atención pediátrica”, indicó.

La madre de familia menciona que el gasto que realiza mensualmente supera los 200 dólares, entre alimentación y otros rubros.

La evolución de Aarón es favorable, pues reaccionó bien a los medicamentos y no necesitó trasplante de médula, los médicos indicaron que aún deberá recibir quimioterapia por un año.

 

 

Ayuda

Ambos casos reciben ayuda del Voluntariado de Solca Núcleo Tungurahua, entidad que apoya a 33 niños con cáncer de la provincia con el transporte a Quito para que puedan seguir con sus tratamientos.

El Voluntariado está conformado por más de 50 personas y lleva más de 20 años al servicio de la ciudadanía, sus oficinas se ubican en las instalaciones del Hospital de Solca de Ambato que está ubicado en Izamba.

Gardenia Maza de Soria, presidenta del Voluntariado, aseguró que el dinero recaudado para apoyar a los niños con cáncer se lo hace a través de autogestión y a través de diferentes eventos que desarrollan a lo largo del año.

De igual manera se cuenta con algunos productos a la venta para que la ciudadanía pueda ayudar adquiriéndolos, el que se presentó actualmente es un calendario denominado ‘Deseos de luz’.

Para solicitar ayuda del voluntariado los padres o representantes de los niños con cáncer pueden acudir a las oficinas de la entidad, no es necesario ningún requisito más que el informe médico del paciente. (RMC)