El primer mandatario aseguró que los problemas del sector energético en los últimos años no se deben a la falta de propuestas técnicas, sino a la incapacidad de ejecución y firmeza para combatir la corrupción enquistada. Entérese de para qué serviría la declaratoria de emergencia.
Este 16 de abril de 2024, el presidente de la República, Daniel Noboa, anunció que se declara e emergencia al sector eléctrico.
Además, el primer mandatario le pidió la renuncia de la ministra de Energía y Minas, Andrea Arrobo. Asimismo, Noboa aseguró que se iniciarán investigaciones a las empresas eléctricas por sabotaje.
«Hoy tomamos una decisión fuerte, una vez más, porque nos toca, la de declarar en emergencia al sector energético del país. He pedido la renuncia de la ministra», dijo el presidente durante un evento en Guayaquil.
A través de su cuenta de X, también afirmó que los problemas del sector energético en Ecuador en los últimos años no se deben a la falta de propuestas técnicas, sino a la incapacidad de ejecución y firmeza para combatir la corrupción enquistada».
Noboa añadió que creó un Comité de Emergencia: «liderado por mí, para resolver los problemas energéticos con capacidad, firmeza y extirpando la corrupción dentro del sector».
Se debe recordar que en su momento, el expresidente Guillermo Lasso también declaró en emergencia al sector eléctrico , pero la mayoría de medidas impulsadas no se concretaron e incluso fueron desmontadas por la nueva administración
Así, la declaratoria de emergencia tendría tres fines específicos para el presidente Noboa:
1.- Ponerse al frente de la crisis eléctrica y tomar decisiones directamente. Así, por ejemplo, dijo: «Nadie me va a cuentear en el último segundo que hay que darle cinco horas de apagones a Guayas, nosotros no vamos a darle más apagones en esta semana. Eso lo hemos tomado como decisión».
En otras palabras, Noboa busca reducir el tiempo de los apagones y amortiguar el golpe político de la actual crisis eléctrica. De sus declaraciones se puede colegir que no confía en los funcionarios del sector y cree que las medidas tomadas fueron desmedidas.
Sin embargo, no queda claro si los apagones se suspenderán hasta que pase la consulta popular o si Noboa solo reducirá la duración de los mismos.
Asimismo, Noboa anunció que se cubrirá el 50% del costo de la luz de abril de 2024 para los ciudadanos; como un mecanismo de compensación por las molestias e impactos negativos de los nuevo apagones, que en el caso de Quito duran hasta 3 horas por hasta dos veces al día.
2.- Acelerar procesos de contratación de generación emergente. En una reciente entrevista con LA HORA durante el pasado 10 de abril de 2024 , Arrobo había reconocido la fragilidad del sistema eléctrico ecuatoriano; pero aseguraba que todo estaba bajo control. Una de sus declaraciones más criticadas fue la que decía, por un lado, que se descartaban los apagones, y, por otro lado, que se podían esperar «desconexiones de emergencia».
La situación se volvió rápidamente insostenible en los últimos días y, antes de que se establecieron cronogramas de apagones desde el pasado 15 de abril de 2024, la molestias y la indignación se acumularon entre ciudadanía y empresarios.
Desde los apagones del final de 2023, cuando todavía gobernaba Guillermo Lasso, hasta la fecha, los problemas del sector eléctrico está intactos; a pesar de la aprobación de la Ley de Competitividad Energética.
El Gobierno de Noboa, según la ahora cesada ministra Arrobo, demoraría al menos 3 meses en contratar la generación térmica adicional que se necesita para suplir lo que no generan las hidroeléctricas con caudales bajos y lo que no llega de Colombia. El vecino país está enfrentando una seria sequía y el riesgo de también recurrir a los apagones.
Este 16 de abril de 2024, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, dijo: «Siento mucho por el pueblo ecuatoriano que comience el racionamiento eléctrico en su país»
Asimismo, recordó el compromiso hecho el año pasado con el anterior presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, de «proveer el servicio hasta que no se pusiera en peligro la misma estabilidad eléctrica de Colombia».
En este contexto, la declaratoria de emergencia podría ayudar a saltarse etapas y contratar en menor tiempo porque la situación de los bajos embalses de las hidroeléctricas, y la caída en la llegada de energía desde Colombia, no parecen tener una solución inmediata.
3.- Reestructurar instituciones e impulsar investigaciones. A la luz de las declaraciones del Noboa, otro objetivo podría ser viabilizar cambios en instituciones y llevar a cabo las investigaciones anunciadas a las empresas distribuidoras.
A través de su cuenta de X, el primer mandatario que «se ha iniciado una investigación por sabotaje en ciertas zonas y plantas eléctricas»
De confirmarse, de acuerdo con Noboa, antes de la consulta popular, «pediremos a la Fiscalía y al sistema de Justicia que se aplique todo el peso de la ley para investigar y procesar a los responsables»
En su momento, Fernando Salinas, docente universitario y expresidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos de Pichincha (Cieepi), explicó a LA HORA que uno de los grandes problemas del sector es que en los directorios y consejos de administración no se ubica a cuadros técnicos.
A eso se suma que Gobierno Central, alcaldías y prefecturas meten la mano para utilizar a las empresas públicas a su conveniencia política.
Esta politización entorpece procesos como la conformación de fideicomisos para manejar los recursos de las empresas de distribución. En esas empresas, los representantes de los gobiernos locales son los que han bloqueado que caminen proyectos como el bloque de 500 megavatios y el fotovoltaico El Aromo y el eólico Villonaco.
La ahora cesada ministra Arrobo, sin embargo, había asegurado que los problemas con esos proyectos ya estaban superados. El presidente Noboa deberá revisar realmente qué está pasando en el sector.
¿Por qué es peligroso atribuir la crisis eléctrica solo al sabotaje?
El presidente Noboa, durante sus últimas declaraciones públicas ha intentado posicionar que la mayor responsabilidad de la crisis eléctrica está en el sabotaje y la conspiración contra su Gobierno y la consulta popular.
El ex director del SRI y ex asesor en el pasado Gobierno de Guillermo Lasso, Francisco Briones, sin embargo, cuestionó que Noboa quiera desviar la atención de problemas reales del sistema eléctrico nacional.
Sobre la posibilidad de que se suspendan los apagones hasta después de la consulta popular, Briones recalcó que discrepa con este tipo de decisiones.
«Nos podría costar caro, carísimo, extralimitar la capacidad de las hidroeléctricas y utilizar los limitadísimos recursos hídricos en los embalses. No es que esté feliz sin energía eléctrica, pero a veces no se trata de la mejor decisión sino de la menos mala. O quizá la menos pésima en estos casos, apuntó.
Por su parte, Alberto Acosta Burneo, economista y editor de Análisis Semanal, argumentó que las respuestas políticas (subsidiar el 50% de la planilla eléctrica y acusar al sabotaje de causar los apagones) son útiles para generar respaldo popular. Pero son inútiles para solucionar problemas técnicos.
«¿Para cuándo una ley eléctrica que acabe con el monopolio eléctrico estatal y abra la puerta a la inversión?», se preguntó. (JS)