El Gobierno de Lasso operará normalmente el ITT hasta el final de su mandato y dejará el apagado paulatino del bloque petrolero al próximo Gobierno

AMBIENTE. El ministro de Energía y Minas, Fernando Santos Alvite, considera que desmontar el ITT costará mucho tiempo y dinero.
AMBIENTE. El ministro de Energía y Minas, Fernando Santos Alvite, considera que desmontar el ITT costará mucho tiempo y dinero.

Cerrar todos los pozos y desmontar toda la infraestructura del ITT será una empresa costosa y larga. El país no tiene dinero para financiarla y el actual Gobierno solo dejará los estudios.

El ministro de Energía y Minas, Fernando Santos Alvite, informó que hasta el final del periodo presidencial de Guillermo Lasso se seguirá explotando de manera normal el bloque petrolero ITT, ubicado en la provincia amazónica de Orellana. Es decir, no se reducirá un barril de los casi 60.000 barriles diarios que actualmente se explotan ahí.

La aplicación del resultado de la consulta popular, donde más del 58% de ecuatorianos decidieron que el petróleo de ese bloque se quede indefinidamente en tierra y ya no se explote más, quedará en manos del próximo presidente.

“La situación es muy difícil, muy complicada y delicada. Nosotros haremos los estudios y daremos alternativas al nuevo Gobierno para que se tome la decisión correspondiente. Mientras el Gobierno del presidente Lasso esté en ejercicio, seguiremos operando normalmente el ITT, solo haremos los estudios para el desmantelamiento de la infraestructura y el cierre de los pozos”, puntualizó Santos Alvite.

El ministro explicó que el apagado y desmontaje de un bloque petrolero en producción es una empresa que no se ha hecho en el mundo; y no es lo mismo que apagar la luz de una habitación.

Proceso costoso y largo

“Desmantelar la infraestructura requiere ser muy cuidadoso. Usted tiene que sacar la tubería de debajo de la tierra, con todo cuidado porque una pequeña ruptura produciría un derrame y un terrible daño ambiental. Es una infraestructura que produce 60.000 barriles por día. Esto es una cosa inmensa”, aseveró Santos Alvite

El ministro de Energía consideró que un año es un periodo exageradamente corto para cerrar completamente el ITT. Cálculos preliminares de Petroecuador apuntan a por lo menos 4 años de trabajos.

Por eso, Santos Alvite cree que el próximo Gobierno tendrá que hacer una consulta a la Corte Constitucional para pedir una extensión en el plazo de 1 año.

Además, el nuevo presidente deberá buscar cómo financiar un desmontaje que costará al menos entre $500 y $600 millones. Esto sin tomar en cuenta los más de $250 millones por compensaciones y terminación anticipada de ciertos contratos.

Petroecuador, al igual que el sector público en su conjunto, no tiene disponibilidad de recursos para financiar el cierre de una infraestructura que ha costado más de $2.000 millones y más de 10 años de trabajo poner en marcha.

Andrés Brito, ingeniero petrolero, explicó que actualmente Petroecuador ni siquiera tiene dinero suficiente para invertir en sus propias operaciones.

“Cerrar el ITT es una pérdida por partida triple. Se pierde ingresos petroleros, se desperdicia una inversión millonaria y se crea un gasto sin financiamiento. Se podría buscar deuda o tomar decisiones difíciles en temas de gasto público”, afirmó Brito.

LA HORA publicó que, solo en lo referente a cubrir la pérdida de ingresos petroleros, el actual ministro de Economía, Pablo Arosemena, ve dos opciones viables: O subir impuestos o reducir sustancialmente el subsidio a los combustibles.  (JS)

Alternativas expuestas por los Yasunidos como electrificar el transporte público, hacer canjes de deuda por conservación como se hizo para las Galápagos, o pedir aportes internacionales, son inviables a corto plazo, en el mejor de los casos, y generaría muchos menos ingresos de los que se necesitan. (JS)

Solo hasta 2025, el cierre del ITT causaría una pérdida de al menos 107.000 empleos formales, según el Banco Central.

Ecuador está en riesgo de caer al sótano en la calificación crediticia

Hace menos de una semana, la calificadora de riesgos Fitch Rating había bajado la calificación crediticia del Ecuador de B- a CCC+.

Ahora, con los resultados de la consulta popular del ITT, Fitch ha anunciado que está evaluando bajar aún más la calificación ecuatoriana.

Es decir, el país podría caer a D o al sótano de las economías más riesgosas del mundo para invertir y recibir financiamiento.

Ficht concluyó que el nuevo presidente “enfrentará importantes desafíos económicos, fiscales y de liquidez externa”, debido a una Asamblea fragmentada y la consulta popular que dispone mantener el crudo bajo el subsuelo en el campo ITT del Parque Nacional Yasuní.

La situación fiscal ya cerraría 2023 con un déficit de más de $4.000 millones y 2024 se presenta e incluso más complejo y con menos ingresos para el próximo Gobierno.

¿Podría revertirse la decisión de no explotar el ITT?

El ministro de Energía, Fernando Santos Alvite, explicó que, además de dejar estudios para el desmantelamiento del ITT, el actual Gobierno también trabajará en un método para poder consultar a las comunidades cercanas al proyecto si dan su consentimiento para que todo se cierre.

“Así como se pidió su consentimiento para el inicio de las operaciones petroleras en la provincia de Orellana, se tendrá que pedir el mismo consentimiento para desmantelar la infraestructura”, dijo.

Santos Alvite recordó que el no ganó con el 57% en Orellana y que los directos involucrados en la operación del ITT no están de acuerdo con dejar el petróleo en tierra

“El artículo 57 numeral 7 de la Constitución es muy claro. Quién debe decidir sobre operaciones petroleras, sobre su inicio o terminación, son los pueblos y las comunidades donde está situado el petróleo. La Corte Constitucional deberá resolver este problema”, concluyó.