La ‘salida fácil’ de suspender clases afecta a 4,5 millones de estudiantes

DISTRIBUCIÓN. De los 4,5 millones de estudiantes 3,1 millones estudian en el sistema fiscal.
DISTRIBUCIÓN. De los 4,5 millones de estudiantes 3,1 millones estudian en el sistema fiscal.

Unicef dice que lo último que se debe cerrar en una emergencia son las escuelas. En Ecuador, pasa lo contrario. Los estudiantes pasaron dos años sin ir a las aulas por la pandemia. Luego llegó el terrorismo. Ahora, los apagones y las votaciones.

¿Cuándo debe cerrarse una escuela? La Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef indican que eso solo debe pasar en casos extremos. Y en esos casos, solo como medida temporal de último recurso.

“Está claro: los gobiernos deben priorizar el apoyo a las escuelas (…) El futuro de la próxima generación depende de ello”, destaca Unicef.

Pese a eso, entre el 18 y 19 de abril, en Ecuador 4,5 millones de estudiantes no asisten a las aulas debido a la crisis energética que hizo que el Gobierno decrete la no jornada laboral en los servidores públicos.

Previo al decreto presidencial se había anunciado que los apagones no afectarían a hospitales e instituciones educativas.

Pero, el Ministerio de Educación explicó que los niños y adolescentes perderían dos días de clases porque “el decreto dispone la suspensión de las jornadas laborales. Los maestros son funcionarios públicos, por tanto también aplica al sistema educativo”. Esto lo informaron en un canal de contacto con periodistas.

“Esto como si no hubiera sido suficiente las clases presenciales perdidas las dos primeras semanas de enero (por el conflicto interno armado)”, señala Karen Proaño, psicóloga educativa. Ella critica la falta de priorización “de los niños, en momentos de emergencias”.

Y es que durante la pandemia por covid-19 (2020), las instituciones educativas fueron de los últimos espacios en abrirse.

Ecuador priorizó, por ejemplo, la apertura de centros comerciales, mientras los niños pasaron más de dos años aprendiendo mediante una computadora, eso, siempre que no pertenecieran al 37% de hogares que no cuenta con internet.

Recuperación de clases en el ‘limbo’

En esta ocasión, al no haber clases presenciales, ni luz para recibirlas de manera virtual, el Ministerio de Educación señaló que “se establecerán con cada Distrito Educativo las estrategias y lineamientos pedagógicos para recuperar la jornada educativa, con el objetivo de cumplir los 200 días de clases”.

Es decir, los padres de familia aún no tienen claridad sobre cómo se nivelarán en estos días.

Amanda Villacís, es doctora, tiene una hija de 9 años y la paralización de la jornada laboral – como muchos otros ecuatorianos– no se detuvo. “Es riesgoso dejar a una niña sola, cuando la escuela es un espacio seguro y el tener luz debería ser básico en estos espacios”, dice.

Otro día por la consulta

Pero a la inasistencia por los apagones se suma la disposición de que, el lunes 22 de abril, 3.983 instituciones educativas no tengan clases presenciales, por ser recintos electorales de la consulta popular.

La psicóloga Proaño indicó que Ecuador debe tener un plan con hojas de ruta para la educación, en caso de emergencia y conmoción nacional.

“Que después de un decreto, el Ministerio empiece a ver qué hace con las clases demuestra que no se piensa en los niños cuando hay una decisión presidencial”, agrega Villacís.  (AVV)

En Ecuador hay 16.130 instituciones educativas de las cuales 12.382 son fiscales, 3.021 son particulares, 616 son fiscomisionales y 111 municipales.

“Las escuelas deben ser las últimas en cerrar y las primeras en reabrir”, Unicef.

Conoce las instituciones educativas que no tendrán clases presenciales por ser recintos electorales.