La audiencia preparatoria de juicio por el asesinato de Fernando Villavicencio se desarrolló de forma mixta (presencial y virtual). Los problemas de internet de algunos abogados retrasaron la diligencia. Entre los conectados a la plataforma zoom estaba uno de los procesados que contestó una llamada pese a estar preso.
«Por favor, enciendan todos sus cámaras», «abogado, no se le escucha», «los que no están interviniendo silencien sus micrófonos, por favor». Las frases coinciden con las dichas por una docente a sus alumnos en una clase virtual, pero no lo es. Quien pide cosas básicas como silenciar los micrófonos es la jueza Irene Pérez, sobre quien recayó uno de los procesos judiciales más importantes del país: el asesinato de Fernando Villavicencio.
Desde el inicio, este proceso fue truncado más de una vez. La diligencia debía realizarse el 29 de noviembre de 2023. Luego pasó para el 19 de diciembre de 2023, pero se volvió a diferir para el 6 de febrero de 2024 y, finalmente, se instaló el 27 de febrero de 2024.
Mal internet
Fueron 33 minutos los que se perdieron durante la etapa en la que los abogados defensores de los procesados debían presentar los vicios legales. Gastón Toro, abogado de Carlos Angulo alias ‘Invisible’, tenía serios problemas de conexión. Cuando intentaba hablar su audio se cortaba. «Señora jueza, permítame conectarme desde otro dispositivo», «Ahí si me escuchan», «Hasta qué parte me escucharon», eran las preguntas que truncaban el desarrollo de la audiencia.
Los problemas de audio y conexión fueron reiterativos en los dos días que duró la audiencia. A momentos, la jueza perdía el audio de la sala del Complejo Judicial Norte, en la que se encontraban presentes Verónica Sarauz, viuda de Fernando Villavicencio; el defensor público, Cristian Rodríguez; Patricia Barragán, víctima colateral y su abogado, Luis Fernandez; la fiscal Ana Hidalgo; además de un alto contingente de seguridad.
«Señorita secretaria, llame al técnico de la sala y que permanezca en la audiencia para solventar cualquier problema», decía la jueza Pérez, quien en reiteradas ocasiones recordaba a los conectados a la diligencia que debían tener las cámaras prendidas pues, el comportamiento debía ser similar a si se trata de un audiencia presencial. Uno de los últimos llamados de atención fue hacia Ramiro García, abogado de Sarauz, quien al ser llamado por la Jueza no estaba en la sala de zoom. Cuando volvió a conectarse dijo haber tenido problemas técnicos.
Otro problema fueron los abogados cuya imagen no se visualizaba claramente, pues estaban sentados detrás de ventanas – es decir– a contraluz.
Preso contestó su celular en la cárcel
Los procesados por el asesinato del excandidato presidencial cumplen prisión preventiva, pero tienen derecho a acudir a sus audiencias. Antes de que se instale la diligencia y mientras se movía la cámara, Víctor F., uno de los procesados, olvidó apagar su cámara y contestó su celular (objeto prohibido), luego se desconectó del zoom. El hecho pasa en medio de estado de excepción en que, supuestamente, se ha hecho respectar que los presos no cuenten con objetos prohibidos como celulares.
Ruidos externos
Pese a los múltiples pedidos de la Jueza fue recurrente que, mientras alguna de las defensas hablaba, se escucharan ruidos externos: conversaciones, sonidos de calle o de carros.
El segundo día, los abogados indicaron que había un eco desde la sala judicial, por lo que se silenció un micrófono. Todo esto truncaba la continuidad de la diligencia en la que la Jueza determinó que cinco de los seis procesados vayan a juicio.
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DATO:
Durante la audiencia, los presentes tienen prohibido usar celular, tomar fotos o hacer videos. Quienes se conectan a la plataforma virtual tienen prohibido grabar o publicar el contenido de la audiencia.
Llamados a juicio
Asesinato Fernando Villavicencio
Autor mediato: Carlos Angulo- alias ‘Invisible’.
Coautora: Laura Castillo- alias ‘La flaca’.
Cómplice: Érick Ramírez.
Cómplice: Víctor Flores.
Cómplice: Elizabeth Chimbo.
*Sobreseído: Óscar Fierro