Ecuador mejora en desarrollo humano pero sin recuperar la trayectoria al 2030

La representante del PNUD en Ecuador, Matilde Mordt (i), junto el responsable de Gobernabilidad y Desarrollo Inclusivo del PNUD en Ecuador, Fernando Pachano (d), participan durante la presentación del más reciente Informe de Desarrollo Humano hoy en Quito (Ecuador). EFE

Según el último informe del PNUD,  Ecuador se ubica en el grupo de países de alto desarrollo humano, pero sus indicadores todavía deben mejorar.

Ecuador subió al puesto 95 del ranking global de desarrollo humano que elabora el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), al presentar una leve recuperación tras el retroceso sufrido en 2020 que resulta insuficiente para alcanzar las metas marcadas dentro de la Agenda 2030.

Así lo advirtió este viernes el PNUD al presentar en Quito su más reciente Informe de Desarrollo Humano, que mide la situación de la salud, la educación y las condiciones de vida de los países, y cuyos datos sobre Ecuador fueron analizados en el marco del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, que se celebra el lunes 17 de octubre.

Bajo el título ‘Tiempos inciertos, vidas inestables: configurar nuestro futuro en un mundo en transformación‘, el documento situó a Ecuador en el puesto 95 dentro de la clasificación de 191 países y territorios, tras haber ocupado la posición 99 en 2020.

Ecuador se ubica así en el grupo de países de alto desarrollo humano donde también hay otros de Latinoamérica como República Dominicana (80), Cuba (83), Perú (84), México (86), Brasil (87) y Colombia (88).

Sin embargo, el responsable de Gobernabilidad y Desarrollo Inclusivo del PNUD en Ecuador, Fernando Pachano, pidió no fijarse en la comparación entre países y mirar a la evolución del país a lo largo del tiempo.

Ahí, dentro de una escala de 0 a 1, el valor del Índice de Desarrollo Humano (IDH) de Ecuador para 2021 es de 0,740, superior al 0,731 de 2020, pero aún por debajo del nivel previo a la pandemia de la COVID-19, que era de 0,760 en 2019.

«No es suficiente para la proyección imaginada al 2030», indicó Pachano, aunque destacó la mejora de Ecuador, según los datos analizados desde que el PNUD elabora anualmente el índice de desarrollo humano.

Persiste brecha de género en ingresos

Entre 1990 y 2021, el valor del IDH de Ecuador creció un 13,7% desde 0,651 hasta 0,740, gracias a progresos en aspectos como la esperanza de vida al nacer, que se elevó en 4,3 años hasta los 73,7, y en el tiempo promedio de escolaridad, que aumentó en 2,8 años hasta los 8,8.

También el ingreso nacional bruto (INB) de Ecuador creció en aproximadamente un 34,9% entre 1990 y 2021 hasta alcanzar los 10.312 dólares, pero con una brecha de género «inaceptable», según Pachano, pues el promedio de las mujeres es de 7.451 dólares y el de los hombres 13.810 dólares.

Asimismo, Pachano advirtió que, si bien la pobreza y la pobreza extrema en Ecuador han vuelto a caer tras aumentar durante la pandemia, las desigualdades entre el sector urbano y el rural han aumentado.

Precedente inédito global

A escala global, el desarrollo humano ha retrocedido en el mundo a niveles de 2016 y ha revertido gran parte de los avances hacia la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

El informe sentó un precedente inédito al reflejar por segundo año consecutivo un descenso en los indicadores de desarrollo humano, algo que es la primera vez que ocurre en los 32 años que el PNUD elabora anualmente este estudio. El 40% de los países volvieron a empeorar en 2021 sus indicadores.

De cara al informe sobre 2022, la representante del PNUD en Ecuador, Matilde Mordt, advirtió que «la foto va a ser desalentadora» ante los procesos inflacionarios y la desaceleración de la economía global marcada por las consecuencias de la invasión de Rusia en Ucrania.

Esto puede conllevar nuevos retrocesos a nivel global, si bien recordó que Latinoamérica se encuentra más aislada que otras regiones del globo a los efectos del conflicto bélico, que añade una capa más de incertidumbres a las que ya había antes de esa guerra.

En ese sentido, Mordt incidió en el dato de que Ecuador es el cuarto país del mundo con el mayor porcentaje de población que se declara bajo estrés, con un 62%.

Inversión, innovación y aseguramiento

Otro de los puntos del informe son los problemas de salud mental, que con vidas más desestabilizadas y la incertidumbre generada por la pandemia, el PNUD recomendó «inversión, innovación y aseguramiento» para brindar mayores redes de seguridad a la población.

La inversión pasa por preparación ante desastres, sistemas productivos más amigables con la naturaleza y en fortalecimiento de las instituciones estatales.

A su vez, con el aseguramiento se busca aumentar los sistemas de protección social y la innovación social en asuntos como combatir el torrente de desinformación en redes sociales y construir ciudadanía desde espacios digitales. EFE