La asambleísta Pierina Correa observa con positivismo los resultados electorales de la muerte cruzada y asegura que no existen divisiones internas. Advierten a la RC que debe renovarse y no “vivir a la sombra de un caudillo”.
En política existe un axioma generalizado, “todo político que respira, aspira”. El significado es sencillo, toda persona que ingresa a la lucha política tiene la aspiración de escalar posiciones y no ser solo un militante de una organización, sino optar por un cargo político y porque no, la Presidencia.
En las últimas semanas, tras la segunda derrota consecutiva en las elecciones presidenciales, a lo interno de la Revolución Ciudadana (RC) se escuchan y se mueven distintos intereses.
Desde la necesidad de un recambio en los lineamientos y sus líderes; pasando por las negociaciones en la Asamblea Nacional que los han acercado al Partido Social Cristiano (PSC) y el oficialista Acción Democrática Nacional (ADN); así como la renuncia de la presidenta del movimiento, Marcela Aguiñaga; hasta la trama de acusaciones de “acoso y extorsión” que protagonizan el exvicepresidente de la República, Jorge Glas, su exasistente, Soledad Padilla, y la pareja sentimental de ella, Ferdinan Álvarez, los síntomas de la irregular situación interna del movimiento que encabeza el expresidente y prófugo de la justicia, Rafael Correa, saltan a la vista de todos.
Ante esto, las principales figuras públicas del correísmo resaltan la fortaleza del movimiento que sufrió una derrota en el balotaje presidencial y reiteran que se mantienen unidos a pesar de los rumores y falsas informaciones.
Por otro lado, analistas políticos advierten sobre los errores cometidos por la RC durante la campaña, el desmoronamiento de sus estructuras y la falta de conexión con las necesidades y prioridades de la población.
No hay divisiones
La asambleísta más votada de Ecuador, Pierina Correa, será quien presida la sesión inaugural de la Asamblea Nacional, durante una conversación con LA HORA destacó que a pesar de los rumores no hay división a lo interno del partido y destacó que evalúa de forma positiva los resultados de la muerte cruzada.
“No hay división, ni por los resultados electorales, ni por las otras cosas que han querido posicionar”, dijo descartando que la situación que involucra a Jorge Glas y el asambleísta Ferdinand Álvarez, tenga implicaciones en lo interno de la RC.
Sobre este punto, Correa acotó que es una situación personal que ha pasado a la acción jurídica. “No opino sobre temas personales, pero esto no tiene por qué afectar al movimiento”.
Al referirse a la situación de la expresidenta de la RC y prefecta del Guayas, Marcela Aguiñaga, Correa acotó que tampoco ha generado división en el partido, porque ya estaba prorrogada en sus funciones.
Remarcó que “tampoco hay divisiones internas como consecuencia de su renuncia (Aguiñaga), simplemente se dio paso a lo que señala el estatuto. No hay ninguna división, nos mantenemos los 51”.
Balance positivo
Pierina Correa hizo un balance positivo de los resultados de las elecciones indicando que el movimiento salió fortalecido y registró un incremento importante en su votación, con respecto a las elecciones de 2021.
La asambleísta rechazó las afirmaciones de quienes califican como una derrota los resultados electorales de la RC. “¿De qué derrota estamos hablando? Yo no veo derrota para nada, porque incrementamos nuestra votación. Por ejemplo, en 2021 mi votación fue de 2’500.000, en números redondos, ahora fue de 3’380.000”.
Sobre las negociaciones en el seno de la Asamblea, argumentó que la RC tiene los puntos claros. “Hemos sido claros en dos líneas rojas, no a los procesos de privatización y no a propuestas de leyes que vulneren, afecten o impliquen la regresión de derechos ciudadanos”. Dijo que en caso de buenos planteamientos, “seremos los primeros en aportar, fortalecer y apoyar”.
Sobre el posible acuerdo de gobernabilidad en la Asamblea Nacional entre el PSC, ADN y la Revolución Ciudadana, reconoció que hubo acercamientos pero admitió que han existido discrepancias, por lo que comparó la situación con lo ocurrido en 2021 cuando se trató de alcanzar un acuerdo con Guillermo Lasso, que luego no se ratificó.
“Ese escenario se repite ahora, ¿qué pasó en 2021? Guillermo Lasso, el mismo día de la sesión inaugural cedió ante las presiones de sus grupos de amigos, del poder y se bajó de la camioneta”, recordó.
Correa detalló que “hubo conversaciones entre ADN, socialcristianos y nosotros. Surgió la desavenencia con respecto al juicio político a la fiscal (Diana Salazar), que muchos traducen como que queremos la cabeza en la fiscal. No se trata de eso”.
Indicó a LA HORA que este 10 de noviembre de 2023 se realizará una reunión en la que esperan tener definiciones sobre el acuerdo para la gobernabilidad, aunque advirtió que en política todo puede pasar. (ILS)
La RC no puede vivir a la sombra del caudillo
La académica y consultora política, Grace Jiménez, al hacer un balance de los resultados tras el balotaje presidencial indicó que la Revolución Ciudadana debe hacer un cambio de rumbo y una revisión de su dirigencia para no seguir viviendo a la sombra de Rafael Correa.
Jiménez fue enfática al señalar que el recién finalizado proceso electoral, “demostró que a la RC no le conviene vivir en la sombra de un caudillo que ya no revoluciona más. No han aprendido el mensaje. Perdieron porque la gente no quiere a un candidato del correísmo sino a Correa”.
Destacó que la dirigencia de RC también debe tener en cuenta que el electorado ecuatoriano ha cambiado. “Los jóvenes están cansados de la confrontación y tienen otras necesidades como la seguridad y el empleo, mientras que la preocupación del bloque correísta es la destitución de la fiscal, eso es un tiro al pie, es un absurdo, es como si planteáramos revivir el juicio político a Lasso”.
Sobre la posibilidad de acuerdos en la Asamblea Nacional, Jiménez augura una alianza oficialista conformada por ADN, el PSC y el Movimiento Construye. A su juicio, “Henry Kronfle significa la vieja política, igual que Correa, esos que dejaron de pensar en los intereses y las agendas nacionales para dedicarse a los acuerdos bajo la mesa”, lamentó.
Grace Jiménez apuntó que si no existe un cambio dentro de la RC, “seguirán perdiendo espacios territoriales como pasó en Azuay, que fue su bastión en 2017. Los jóvenes progresistas y los votos del Movimiento Indígena apoyaron abiertamente a Daniel Noboa”.