La 28 de Septiembre se queda junto a la cárcel de Ibarra

Vecinos. Las grandes paredes de la cárcel colindan con la unidad educativa.
Vecinos. Las grandes paredes de la cárcel colindan con la unidad educativa.

El plantel educativo mantendrá a sus estudiantes en el bloque 2, pero eso significa que el centro de rehabilitación social debe trasladarse a otro lugar.

Redacción IBARA

Las protestas de estudiantes y padres de familia surtieron efecto. El bloque 2 de la unidad educativa 28 de Septiembre mantendrá sus instalaciones junto a la cárcel de Ibarra, en el centro de la urbe.

Esto, a pesar de que el Ministerio de Educación firmó un comodato con el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI), para que se deje de usar como un centro de estudios primario y secundario y pase a ser considerado para una ampliación del centro de rehabilitación social.

“Durante cinco años hemos venido en la lucha por recuperar el bloque 2 de la unidad educativa 28 de Septiembre y lo hemos logrado. Es un triunfo de todos los padres de familia. El bloque 2  se queda con la prestigiosa 28 de Septiembre y no pasará a manos del SNAI, para ampliar la cárcel de Ibarra”, dijo Irma Ordóñez, presidenta de padres y madres de familia.

Meses de diálogos

Este 15 de diciembre de 2022, los representantes de los estudiantes mostraron la documentación firmada por las autoridades del Ministerio de Educación, donde se acuerda que el bloque 2 de la 28 de Septiembre se mantenga en el centro y no sea reubicado, revirtiendo el comodato y la intención de entregarlo al SNAI.

Además, consta la inyección de recursos económicos para realizar adecuaciones en el plantel educativo, lo que incluye la creación de más aulas para los alrededor de 800 alumnos que alberga la institución.

“De igual manera se acordó que el próximo año haya un presupuesto que ha prometido el Ministerio de Educación para seguir arreglando otros espacios del bloque 2. También ha prometido que habrá más estudiantes en la unidad educativa”, agregó Ordóñez.

Resultado de protestas

A pesar de que las confrontaciones con autoridades comenzaron hace cinco años, cuando iniciaron las intenciones de reubicar el espacio educativo y entregárselo a la cárcel, desde septiembre de 2022 se iniciaron mesas de diálogo entre padres y representantes de los respectivos ministerios, pues la decisión de primera mano fue desalojar el bloque 2 de la 28 de Septiembre, pero la toma de las aulas por parte de padres de familia y marchas por las calles impidió que esto se consumara.

“Fue una lucha larga, ardua, social y jurídica, porque en su momento el Ministerio de Educación establecía que la unidad educativa debía salir, pero la lucha de estudiantes y principalmente de los padres de familia hizo prevalecer el derecho de los estudiantes a su educación”, dijo, otro padre de familia.

“El plan de contingencia aprobado por las autoridades educativas no solo contempla que se queden los estudiantes, sino que se repotencie y se construyan más aulas. Siempre la comunidad educativa 28 de Septiembre y la ciudadanía tuvimos razón, es decir fue una lucha en la cual el propio SNAI perdió una acción de protección interpuesta para quedarse con este bloque, con este espacio educativo”, añadió.

La cárcel tendrá que ser reubicada

Una vez concretados los acuerdos para que la unidad educativa junto a la cárcel no sea reubicada, padres de familia y autoridades locales de Ibarra coinciden en que ahora se viene una “nueva lucha”, para que el centro de rehabilitación social salga del centro de la urbe.

Esto se considera no solo por la presencia del bloque 2 de la unidad educativa 28 de Septiembre junto a la cárcel, sino porque a menos de cinco cuadras a la redonda existen colegios, escuelas, universidades y zonas netamente residenciales.

“Una cárcel no puede estar junto a una institución en la que se están educando 800 alumnos. Por eso nosotros decimos que ahora tenemos otra faceta en la reivindicación de los sectores sociales, que es que la cárcel debe irse de este lugar, a propósito de los problemas de inseguridad, de los temas de centros de rehabilitación. Definitivamente una cárcel no puede estar en plena ciudad y debe ser reubicada”, dijo Rodrigo Maldonado, morador del barrio San Martín, donde se ubica la principal penitenciaría de la provincia de Imbabura.

Desde el Municipio de Ibarra, de igual manera, empujan para que la cárcel salga del centro de la ciudad, donde ha permanecido más de 100 años.

En marzo de 2022, el Concejo Municipal decidió, por unanimidad, que se suspenda el permiso de uso de suelo del centro de privación de libertad, lo que obligaría al SNAI a buscar un nuevo predio para levantar una nueva cárcel.

Sin embargo, desde el SNAI han asegurado que por el momento no tienen planes de edificar un nuevo centro penitenciario.

En la cárcel de Ibarra hay un promedio de 500 reclusos, mientras en el bloque 2 de la 28 de Septiembre se educan casi 800 alumnos.