¿Por qué defienden a La Posta?

Esa es la pregunta que muchos nos hicieron ayer tras publicar el cruce de acusaciones entre los dueños de ese medio digital, la Fiscalía, la Policía Nacional y el Gobierno.

LA HORA no defiende el trabajo periodístico de ningún otro medio de comunicación, y solo puede atestar sobre la veracidad y responsabilidad del periodismo que producen sus equipos de trabajo distribuidos en nueve provincias. Sin embargo, LA HORA tiene una bandera de defensa de la Libertad de Prensa y la Libertad de Expresión, derechos fundamentales, irrenunciables y necesarios para mantener una sociedad informada que, a su vez, pueda organizarse y prosperar en democracia.

Es imprescindible separar la defensa del derecho de un periodista, un medio de comunicación y todo ciudadano a expresarse y a obtener información, procesarla y publicarla libremente, de la defensa del contenido y veracidad de dicha información.

Es fundamental, también, que el Gobierno Nacional entienda que todos los estamentos del Estado deben hacer lo suyo para garantizar la Libertad de Prensa y de Expresión, la cual empieza por salvaguardar la vida y la integridad de aquellas personas que ejercen el oficio periodístico en territorio ecuatoriano.

El equipo periodístico en cuestión ha solicitado medidas cautelares a la Corte Interamericana de Derechos Humanos para que el Gobierno proteja a sus miembros, las cuales se resolverán en los próximos días.

La Fiscalía mantiene una investigación que involucra a los dueños de la empresa mediática. Pero hasta que la Justicia lo resuelva -si sucede-, estos ecuatorianos son periodistas y, por tanto, defendemos su derecho a expresarse libremente.