Debates improductivos

Rogelio Morales Cattani

Rogelio Morales Cattani

Se ha llegado a extremos donde decir la verdad ofende, especialmente a quienes delinquen y han cambiado su estilo de vida, convertidos en nuevos millonarios.

Algunas sesiones que se producen dentro de la Asamblea Nacional (plagada de nuevos adinerados) y que, por méritos propios, se han ganado un gran desprestigio, están gastando tiempo y dinero sin justificación, sin buenas ideas y con “debates improductivos” dentro de una selva donde un mini Tarzán y la mona Chita ya no están.

Nuestro sistema democrático no puede subsistir si CSJ, FGE, TSE, CGE, CJ y más estamentos del Estado puedan estar, o están tomados o negociados como cuotas de poder de ciertas “mafias políticas”. El tratar de “apoderarse” de esas instituciones y, desde allí, seguir gestionando impunidades a favor de quienes se han beneficiado de los fondos públicos es una traición a la patria. Basta recordar el caso “sobornos” donde empresarios declararon bajo juramento haber sido chantajeados para, a cambio de aportes económicos a las campañas electorales, luego ser favorecidos con contratos millonarios. Estos hechos, judicializados y con sentencias, son innegables. Y luego dicen: “¿dónde están las pruebas?” esta gavilla de “care tucos”.

Ser demócratas no es solo cumplir con la obligatoriedad de acudir a sufragar cada cierto tiempo, hay que acostumbrarse a participar en actividades que promuevan el desarrollo nacional, espacio donde cada persona puede opinar o reclamar libremente, sin caer en la pasividad o inacción que luego son aprovechados por cierta dirigencia política que precisamente busca eso, ser pastores de borregos o comandantes de ejércitos de guerreros de madera.

Contrario a lo que se creía, las democracias suelen (según ciertas condiciones), ser más frágiles que las dictaduras. De eso también se aprovechan los autócratas, que tratan de desmoronar cualquier gobierno que no sea el que ellos puedan administrar, o participar “desde la sombrita”, o como vulgares “campaneros”.

[email protected]