Se habría cobrado por espacios para vender afuera de una escuela al sur de Ambato

La puerta del establecimiento fue sellada para evitar que ventas externas de comida, sean adquiridas por los estudiantes.
LUGAR. La puerta del establecimiento fue sellada para evitar que ventas externas de comida, sean adquiridas por los estudiantes.

Indignadas están algunas vendedoras de comida y golosinas que se ubican en la parte externa de la Unidad Educativa Honduras, situada en el sector de Huachi San Francisco, al sur de Ambato.

Según las comerciantes, casi por siete meses habrían pagado 50 centavos diarios para poder ponerse en la parte externa de la escuela y que los estudiantes puedan comprar sus productos a la hora del recreo.

 

El problema

Supuestamente, una mujer, a nombre de una funcionaria de la entidad educativa, era la encargada de realizar los cobros.

Una de las denunciantes, quien prefirió mantener su nombre en reserva por temor a represalias, aseguró que ella sí paga los 50 centavos para poder trabajar.

“Decían que esto era una colaboración para mejoras de la escuela”, explicó la vendedora.

Además, mencionó que en otra ocasión les habrían solicitado cinco dólares para comprar pintura para la escuela. “Así nos pedían, pero como dejamos de pagar, ahora ya no dejan que los estudiantes compren a la hora de recreo”, dijo otra perjudicada.

La Hora llegó hasta las instalaciones de esta unidad educativa, en donde se constató que los espacios que antes había en la puerta de ingreso, y que era por donde los estudiantes compraban, estaban cubiertos con cartones.

Según las mujeres, ahora ya no les cobran, pero los estudiantes ya no pueden comprarles en la hora de receso.

EL DATO
En algunos videos enviados por una de las denunciantes se escucha el reclamo de las vendedoras al ser solicitadas moverse del lugar.

 

Desde la entidad

Eduardo Chango, rector de la Unidad Educativa Honduras, aseguró que nunca se ha cobrado nada. “Cuando fui profesor nunca escuché de ningún cobro, y ahora que soy autoridad tampoco”, explicó Chango.

El Rector fue enfático en que ninguna de las acusaciones dadas por las vendedoras sería real. “No sé qué pretenden con estas denuncias, esto solo da mala imagen”, dijo.

A su vez, mencionó que los profesores no tienen ningún bar, ni en la sección matutina, ni vespertina. “Hay un espacio para expendio de comida que es manejado por el Comité de Padres de Familia y de todo este tiene conocimiento el Distrito de Educación”, comentó el Rector.

Además, mencionó que su labor también es el cuidado de los estudiantes, por lo que por consejo del Distrito se cubrió la puerta, ya que las personas que venden alimentos en la parte externa de la institución lo hacen en medio de una cancha de tierra.

“Cuando hace sol, corre el viento y el polvo contamina los alimentos, también hay perros por aquí que hacen sus necesidades; entonces por un tema de que esto no se convierta en un foco de infección para los alumnos, se recomendó cubrir el portón”, puntualizó el Rector. (MAG)