Quito es una ciudad de clase media donde la economía se mueve por los microempresarios y el comercio autónomo informal

Comercio. Los quiteños buscan cómo ganarse la vida, a pesar del mal manejo político.
Comercio. Los quiteños buscan cómo ganarse la vida, a pesar del mal manejo político.

La ciudad necesita menos tramitología, gasto público eficiente y mayor acceso al crédito para desarrollar todo su potencial productivo.

La pandemia y la crisis económica provocaron que el número de empresas en Quito se redujera en un 8%. Sin embargo, las 171.840 empresas activas en la capital mueven alrededor de $151 millones de ventas diarias.

La principal fuente productiva son las microempresas (90,2%), seguidas por las pequeñas empresas (7,37%); mientras las medianas y grandes empresas representan el 2,3% del total.

Andrea Rodríguez, economista y emprendedora quiteña, explicó que la ciudad es predominantemente de clase media y emprendedora; pero ha sido fuertemente castigada por sucesivas administraciones municipales ineficientes y llenas de burocracia.

“Quito está, dentro de varias mediciones internacionales, como una de las capitales de América Latina donde más trabas se le ponen a la formalización y a las operaciones, sobre todo a las microempresas. Los trámites ineficientes y las trabas cuestan, en tiempo y dinero, hasta tres veces más a los emprendedores quiteños que a sus pares de la región”, puntualizó.

El costo de emprender

Por eso, de cara a las próximas elecciones seccionales, los ciudadanos deben evaluar si los candidatos a Alcalde realmente tienen propuestas para desburocratizar la gestión municipal, reducir trámites y corregir el ineficiente sistema de los impuestos prediales.

Marco Narváez, microempresario textil, puntualizó que el Municipio debe ser un facilitador de la vida y la producción de los quiteños; pero lo que ha pasado en los últimos años es que se acumulan los problemas de movilidad, calidad de servicios, contaminación, burocracia, inseguridad, entre otros.

Como reportó LA HORA en una nota del 5 de enero de 2023, el Municipio de Quito recibe millones de dólares desde el Gobierno Central y cobra millones de dólares en impuestos y tasas; pero es muy ineficiente al ejecutar su presupuesto, sobre todo en temas de obra pública y seguridad.

Todo eso aumenta el costo de hacer empresa en la ciudad entre un 20% y 40%.

Además, ha provocado, junto con los todavía bajos porcentajes de acceso al crédito (menos del 40%), que Quito también sea una ciudad con 82% de comerciantes autónomos en la informalidad y con la tasa más alta de denuncias por chulco o préstamos informales.

Anabel Catota, pequeña comerciante de Carcelén, en el norte de la ciudad, explicó que los chulqueros en muchas ocasiones son la única opción para seguir con las ventas; aunque se tenga que pagar más de $40 al día para pagar un préstamo.

En este escenario, de acuerdo con Rodríguez, las autoridades municipales y nacionales deberían trabajar de la mano para potenciar dependencias como ConQuito, crear un fondo garantías y créditos para emprendedores, establecer incentivos para fondos de inversión e incubadoras, entre otras medidas.

Si no se mejoran las condiciones para emprender en la ciudad, gran parte de emprendedores, pero sobre todo comerciantes autónomos pueden convertirse en nuevos pobres en poco tiempo.

Grupos afectados

Las políticas sociales, productivas e incluso de obra pública en Quito deben tomar en cuenta que dos grupos son los más castigados por la pobreza en Quito.

La población con más incidencia está entre los 30 y 64 años. Alrededor de 176.374 quiteños de esas edades viven con menos de $87,57 mensuales. A pesar de estar en la etapa más productiva, la mayoría (sobre todo mujeres) sobrevive del comercio informal más precario y de los bonos y ayudas sociales.

De la mano de esta realidad, el segundo grupo está en los niños de hasta 12 años. Alrededor de 133.213 menores viven sin las mejores condiciones de desarrollo.

Por eso, una forma efectiva de luchar contra la pobreza en la ciudad es comenzar por implementar programas efectivos de capacitación técnica y emprendimiento dentro de la población de 30 a 64 años. (JS)

En promedio, un trabajador privado con empleo adecuado en Quito gana $619,8; mientras un independiente llega a $437,4 mensuales.
50% de las licencias para actividades económicas en Quito se concentra en: venta por menor de bebidas alcohólicas, productos en tiendas, prendas de vestir, productos farmacéuticos, actividades de lavado y corte de cabello, masajes, manicura y pedicura, venta de productos de telecomunicaciones y reventa de servicios de telecomunicaciones, restaurantes y cafeterías.