El nuevo Gobierno heredará casi $2.000 millones en pagos atrasados

RETO. Guillermo Lasso asume un gobierno con problemas fiscales y económicos.
RETO. Guillermo Lasso asume un gobierno con problemas fiscales y económicos.

Unos $900 millones corresponden al 40% de aporte estatal al IESS; cubrir todas las deudas tomará cuatro años. Economía pinta un panorama ‘irreal’.

Guillermo Lasso heredará una abultada lista de atrasos, pese a que las actuales autoridades aseguran que dejarán pagados todos los sueldos públicos y las transferencias corrientes con los gobiernos locales hasta el 24 de mayo 2021.

Así, casi $2.000 millones en obligaciones pendientes tendrán que gestionarse. De ese total, $900 millones corresponden a valores no transferidos por concepto del 40% de aporte estatal al fondo de pensiones del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).

Mauricio Pozo, ministro de Economía, explicó que se está buscando cerrar un acuerdo o cronograma de pagos hasta el último momento, pero todavía no hay nada concreto.

“En todos los periodos de gobierno quedan cuentas pendientes por cancelar. Todos los días entran facturas y se pagan obligaciones. Lo importante es que hemos logrado bajar el nivel de atrasos desde más de $3.600 millones que se tenían en septiembre de 2020”, dijo.

Cuatro años para cubrir atrasos

El actual Gobierno dejará establecido un cronograma para ir pagando todas las deudas pendientes. De acuerdo con Pozo, esa tarea será gradual y tomará cuatro años; es decir, todo el nuevo periodo presidencial.

“Usted puede limpiar de una sola, pero no le da la capacidad de liquidez, o tendría que sobre endeudarse. Todo tiene que ser técnicamente administrado”, acotó

Cada mes se necesitan por lo menos $1.600 millones para cubrir el funcionamiento básico del Estado y las transferencias corrientes; por eso es complejo tener efectivo disponible inmediatamente para ir descontando los atrasos.

Entre los principales acreedores están los gobiernos locales por casi $300 millones y deudas con el sector privado (incluidos proveedores) por $350 millones.

Además, según Jaime Carrera, miembro del Observatorio de la Política Fiscal, desde el pasado abril no se registraron todas las obligaciones a pagar por remuneraciones. En otras palabras, se difirieron desembolsos por fondos de reserva, subrogaciones, encargos, etc., tanto en gastos corrientes como de inversión. (JS)

Detalle de atrasos

 

 

 

Gobiernos locales $287 millones
Sector privado  

$ 350 millones

Inversión y otros  

$400 millones

IESS  

$900 millones

Ingresos que “inventa” el ministerio de Finanzas

El ministro de Economía, Mauricio Pozo, ha recalcado que dejará una caja fiscal en orden y con cifras que superan las metas del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Así, la versión oficial es que se pasó de un déficit (más gastos que ingresos) de $1.000 millones al inicio de 2021, pero se dejará un superávit de $14 millones.

Sin embargo, Jaime Carrera, miembro del Observatorio de la Política Fiscal, aseguró que esas cifras no son confiables, debido a que no se están registrando todos los gastos, se difieren otros e, incluso, contabilizan ingresos que no existen.

Por ejemplo, en abril se incluyeron $604 millones por la recaudación del “Sistema Público de Pago de Accidentes de Tránsito (SPPAT)”; con el fin “de aumentar ficticiamente los ingresos y reducir artificialmente el déficit”.

Carrera recalcó que el hueco fiscal que heredará el presidente Guillermo Lasso será de $900 millones hasta el 24 de mayo 2021.

Sin embargo, Pozo afirmó que los organismos multilaterales han mostrado su satisfacción por el proceso de transición que se lleva a cabo y el manejo de las cuentas fiscales.

El actual ministro y el entrante, Simón Cueva, viajaron hace dos semanas a Estados Unidos para reunirse con el Fondo Monetario Internacional (FMI), Banco Mundial (BM), Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y departamento del Tesoro de Estados Unidos.