Menos del 1% de las Pymes utilizan la bolsa de valores para financiarse en Ecuador, a pesar de que puede ser más barato que un préstamo tradicional

Transacciones. Las empresas pueden conectarse directamente con inversionistas en la bolsa de valores.
Transacciones. Las empresas pueden conectarse directamente con inversionistas en la bolsa de valores.

Desde emisión de acciones hasta papeles de deuda, la bolsa de valores tiene mucho potencial para que los emprendedores encuentren liquidez.

El financiamiento empresarial a través de la bolsa de valores todavía es mínimo en el país. Según Fabricio Arellano, jefe de operaciones en Bolsa de Valores Guayaquil S.A., al momento se tiene a 60 empresas que se financian con la emisión de acciones: mientras que vía emisión de deuda se encuentran 350 empresas.

De ese total de un poco más de 400 compañías, solo 80 Pymes (Pequeñas y medianas empresas) han visto una oportunidad de encontrar liquidez e impulsar su negocio en el mercado de valores.

El último directorio empresarial, elaborado por Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), apunta a que en el país existen registros de 48.553 Pymes. Esto quiere decir que menos del 1% están involucradas en operaciones con el mercado de valores.

Arrellano explicó que se está perdiendo una gran oportunidad de desarrollo porque la bolsa de valores funciona como un mercado de desintermediación, lo que significa que se pone en contacto a las empresas que requieren financiamiento directamente con los ahorristas e inversionistas.

“Las empresas pueden acceder a este mercado de acuerdo con sus necesidades de liquidez, con plazos y una estructura de pagos flexible. Además, se encuentran tasas de interés menores que el costo financiero del sistema tradicional bancario del país”, recalcó.

Registro y facilidades

Desde la última reforma a la Ley del Mercado de Valores, que está vigente desde 2018, existe un Registro Especial Bursátil que está diseñado para que las Pymes, pero también las instituciones de la Economía Popular y Solidaria (microempresas), puedan participar en el mercado de valores con requisitos menos rígidos que para las empresas más grandes.

Arrellano afirmó que, si bien se deben cubrir costos por la estructuración de la emisión (deuda o acciones) y por la negociación en bolsa, las Pymes no deben pagar otros costos como el registro en la Superintendencia de Compañías y el registro en la bolsa de valores.

Asimismo, se tiene una rebaja del 50% en las comisiones por transacción, en comparación con lo que deben pagar las grandes empresas. A esto se suma que las Pymes están exentas del trámite de obtener una calificación de riesgo.

En el mercado de valores, la Pyme, junto con la casa de valores asesora, estructura la emisión de deuda o acciones con base en un análisis del flujo de caja (ingresos y gastos). Con eso, se establecen plazos y periodicidad de pago en función de la realidad y la capacidad”, dijo Arellano.

Con cada Pyme se puede hacer un análisis particular de la situación financiera y elaborar una estrategia a la medida.

En el tema de la tasa de interés, el microcrédito en el sistema bancario puede costar al menos 22%; y el financiamiento para Pymes está entre el 15% y 16%.

Por su parte, en el mercado de valores, las emisiones para Pymes se han colocado con tasas que van entre el 11% y 12%.

“No se han aprovechado las oportunidades de financiamiento del mercado de valores por un problema de desconocimiento y falta de cultura bursátil en el país. El primer paso, si una Pyme está interesada, es contactarse con una de las casas de valores autorizadas”, aseguró Arellano. (JS)

La mayoría de las empresas que se financian actualmente en el mercado de valores ecuatoriano son de los sectores comercial e industrial.
Un mercado de valores desarrollado es igual a una economía con crecimiento a largo plazo. Por eso, el presidente Guillermo Lasso apunta a un decreto ley para impulsar al sector.

Tres opciones principales de financiamiento

Las empresas se pueden financiar por diferentes vías en el mercado de valores. En primer lugar, está la opción de ir por el patrimonio con la emisión de acciones. Con esto, se comparte la propiedad y las utilidades con otros. Los pagos están en función de las ganancias de la empresa.

También está la emisión de deuda, tanto obligaciones de largo plazo como papel comercial de corto plazo.

Una tercera alternativa es levantar financiamiento a través de utilizar los activos que tiene la empresa.

Por ejemplo, si la Pyme vende a crédito, las facturas por cobrar se pueden convertir en facturas comerciales negociables; y con eso obtener liquidez de forma más rápida.

En promedio, una emisión de obligaciones o acciones en el mercado de valores puede demorar entre 3 y 4 meses.

Entrar en el radar de los inversionistas

Fabricio Arellano, jefe de operaciones en Bolsa de Valores Guayaquil S.A., explicó que la inscripción en el catastro público de la bolsa de valores pone a la empresa en el radar y la hace visible a todo tipo de inversionistas.

Así, se puede hacer contacto con los grandes inversionistas institucionales. En el lado público están instituciones como el Biess (Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social), Issfa (seguridad social del Ejército), Isspol (seguridad social de la Policía).

 Por el lado privado, se puede tener acceso a inversionistas como las administradoras de fondos, compañías de seguros y también personas naturales con ahorro (liquidez para invertir).