El Congreso brasileño aprueba un proyecto que pone impuestos a las apuestas por internet

Los pronósticos deportivos siguen ganando adeptos.
Los juegos en línea se han popularizado. (Archivo)

El proyecto establece altos impuestos para las empresas y los usuarios. Quieren «dar seriedad» al sector. Conozca los detalles.  

El Congreso brasileño aprobó este viernes un proyecto de ley que regula y establece una serie de impuestos para las empresas de apuestas deportivas y juegos de azar por internet y para los usuarios.

El texto, que ya recibió el aval del Senado, debe ser sancionado por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo Gobierno impulsó la medida con la que busca aumentar la recaudación y aliviar el creciente déficit fiscal que soporta el país.

El proyecto establece que las empresas tendrán que pagar un 12% sobre su facturación, mientras que a los apostantes se les aplicará un 15% sobre el valor neto de los premios que obtenga en un año y siempre que estos superen los 2.112 reales (430 dólares).

La recaudación se destinará a las áreas de educación, seguridad pública y deportes, entre otras.

El presidente de la Cámara de Diputados, Arthur Lira, subrayó la importancia de regular y «dar seriedad» al sector para evitar, por ejemplo, «el blanqueo de capitales».

En este sentido, la propuesta también incluye una serie de requisitos para que las empresas de apuestas por internet puedan operar en el país.

Las llamadas ‘bets’ tendrán que recibir la autorización del Ministerio de Hacienda, tener «sede y administración» en territorio brasileño y «comprobar su experiencia» en el ramo, entre otras exigencias técnicas marcadas por el Ejecutivo.

Además, deberán tener entre sus socios a un brasileño que ostente por lo menos un 20% del capital social de la empresa, mientras que el accionista controlador estará impedido de actuar de forma directa o indirecta en una entidad deportiva profesional.

Asimismo, las empresas de apuestas, que vienen creciendo desde la última década en Brasil, deberán desembolsar hasta 30 millones de reales (6,2 millones de dólares) por los derechos de explotación de hasta tres de sus marcas comerciales por un máximo de cinco años.

El texto también las obliga a adoptar prácticas para combatir el lavado de dinero, prevenir la manipulación de apuestas e incentivar un uso responsable de su plataforma. (EFE)