Salud mental en sanitarios

LUIS COELLO KUON YENG
LUIS COELLO KUON YENG

¿Nos hemos puesto a pensar en la salud y equilibrio mental de los profesionales sanitarios durante la pandemia de covid-19, sobre todo en aquellos que están, y seguirán, al frente del cuidado directo de pacientes con esta enfermedad?

Los profesionales sanitarios se enfrentaron al coronavirus en los momentos más duros, cuando el virus aún era un auténtico desconocido e ignoto. Lo hicieron desprotegidos, con el miedo a cuestas de no saber si se contagiarían a ellos mismos o a sus familiares más cercanos. Durante unos meses, recibieron los aplausos desde ventanas y balcones, estos les ayudaban a soportar la angustiante sobrecarga laboral con la que lidiaban día a día. Ahora, dos años después, siguen acusando el estrés y la ansiedad, y los problemas mentales han aflorado en los sanitarios más que en ningún otro grupo de la población, cuando sus condiciones laborales siguen siendo tan limitantes como a principios de 2020.

En España, el diario El País acaba de publicar una nota periodística, en la cual acusa que tras la primera oleada del coronavirus, casi el 46% de los profesionales sanitarios sufrían algún trastorno relacionado con la ansiedad (22,5%), ataques de pánico (24%), síndrome de estrés postraumático (22,2%), depresión (28,1%) o un abuso de sustancias (6,2%), frente al 23,6% de la población general. Son los datos que se desprenden del estudio Mindcovid, financiado por el Instituto de Salud Carlos III y coordinado desde el Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Biomédicas (IMIM) y que analiza la influencia que ha tenido la pandemia estos dos últimos años, además de entre la población, en 10.000 profesionales sanitarios.

Los números son inquietantes. Sé de muchos profesionales sanitarios, del hartazgo de aún tener que soportar la carga de enfrentarse ante pacientes gravemente enfermos que siguen llegando a los hospitales.

De entre los principales grupos que se ven más afectados están las mujeres. Carol A. Berstein, médico psiquiatra del Montefiore Health System, sostiene que la carga fue mayor en este género ya que no solo se trata de ser profesional en Medicina, también se es madre, esposa.

El estrés generado ha repercutido negativamente en sus relaciones familiares, de amistades y sentimentales. Urge la necesidad de que los hospitales elaboren planes para mejorar la salud mental, emocional de quienes padecen estos trastornos. La Medicina Ocupacional juega un papel importante en éstas circunstancias.