El 1 de diciembre se celebró el Día de la Lucha Contra el VIH (virus de inmunodeficiencia adquirida). Se cumplen 40 años desde que irrumpiera en nuestras vidas y se convirtiera en una pandemia que, a pesar de los grandes avances, sigue siendo aún estigmatizada, que sigue cobrando vidas y que se sigue expandiendo, esto debido a las pocas políticas de prevención gubernamentales.
Durante cuatro décadas, los avances en la ciencia, los derechos humanos y la inversión en salud pública han impulsado un éxito notable contra el sida en algunos lugares y poblaciones, sin embargo, la brecha de desigualdad sigue perenne y quizás continúe incrementándose, ocasionado por la profunda crisis económica, social y ética que estamos atravesando. Esto podría incidir negativamente en el acceso a la terapia antiretroviral de personas infectadas con este virus.
Prevención
Se torna imperativo promover de manera más enérgica la prevención de nuevas infecciones mediante una mayor información y conciencia de la necesidad de tomar precauciones; esto sobre todo a grupos de personas consideradas de mayor riesgo o mayor exposición. Se debe reducir el número de casos que no han sido aún diagnosticados, ya que son estos los que diseminan el virus e infectan a otras personas.
El Instituto Nacional de Salud de los Estados Unidos, ha lanzado su proyecto para reducir los casos nuevos de infección por el VIH en más del 90% hacia el año 2035. Los dos pilares esenciales de este proyecto son dos: 1-el masivo testeo a la población americana.
Esto quiere decir la realización de un número enorme e ingente de exámenes para detectar personas portadoras del virus de inmunodeficiencia adquirida y 2-una agenda que permita la distribución y a su vez una gran disponibilidad de medicamentos antiretrovirales en todo el territorio americano.
Combatir estigmas
La propuesta es interesante y audaz. Pero no deja de ser esperanzadora para poder mejor los aspectos de sobrevida de estas personas. En nuestro medio es importantísimo, asimismo, combatir los estigmas hacia las personas con VIH.
Pedimos que los antirretrovirales no escaseen, asimismo a demás personas con otras enfermedades. La salud es un Derecho constitucional.