Voto útil

Matías Dávila

Matías Dávila

Siempre que oigamos esta arenga, hay que preguntarnos: ¿voto útil para quién? Los ‘famosos’ líderes de opinión, aprovechando su credibilidad y llegada, ahora salen con el cuento del ‘voto útil’. Seguramente en la mayoría de provincias donde haya la posibilidad de un empate, unos ‘iluminados’ incitarán a los indecisos a ‘no desperdiciar’ el voto. Aquí hay que preguntarse a quién están queriendo favorecer. Seguramente son sus intereses los que peligran; no los tuyos, no los nuestros. ¿Recuerdas cuando nos pedían que votemos por el señor Lasso porque de lo contrario nos convertiríamos en Venezuela? Bueno, no somos Venezuela. Somos un país donde cada día más personas emigran; donde los presos tienen el control de las cárceles; donde los adultos mayores tienen –literalmente— que mendigar afuera de los hospitales públicos para poder comprar las medicinas que les niega el Estado; donde unos asambleístas piden dinero en efectivo al Presidente de la República, él se enoja, denuncia, quita la denuncia y termina por no pasar nada; somos un país donde el Presidente llegó al poder con la frase “Andrés, no mientas otra vez” y él miente sin descaro en las entrevistas que le hacen; donde la corrupción sigue campeando como Juan en su casa. Sí, ventajosamente no nos convertimos en Venezuela.

Muchos de esos que te invitan a no desperdiciar el voto y a votar ‘útilmente’, defienden claramente sus intereses. Entonces la fórmula para votar en el país entero es apelar al ‘historial’. Los políticos se dejan ver por las cosas que hacen más que por las cosas que dicen. Ellos tienen la capacidad de insultar, denigrar, acusar y no demostrar… y aquí no ha pasado nada.

Por favor, no votes por miedo a que ‘vuelvan’ , a que ‘se queden’ , a que nos convirtamos en Haití o cualquier otra estupidez. Vota por las razones que tú estimes que son las correctas. Así nomás es.