En mis años de soltería conseguir una cita no era tarea sencilla, pero tenía su encanto. Las relaciones se daban entre compañeros de clase, de trabajo o durante una fiesta o encuentro social. Ya después, la tecnología intervino y las citas en línea generaron un boom en la forma de relacionarnos. Esa explosión facilitó también la posibilidad de que personas homosexuales pudieran encontrar pareja, sobre todo en sociedades en donde las preferencias sexuales se guardan bajo el tapete. Pero, aún así, miembros de la comunidad LGTBIQ (lesbianas, gais, transexuales, bisexuales, intersexuales y queers) reportaban discriminación en estas aplicaciones.
Lo cierto es que el debate de la identidad de género nos guste o no, es muy cotidiano en los países desarrollados. A tal punto que Tinder, la aplicación de citas más popular en el mundo, en su empeño por ser inclusiva, presenta 27 identidades de género para autodefinirse y encontrar una pareja con gustos similares a los tuyos. ¡Sí, leíste bien, 27!
No voy a mentir. Casi me caigo de la silla cuando vi el titular de esta noticia publicada en España ¡hace casi cinco años! Es decir que, esto ni siquiera es novedad para quienes transitan habitualmente por esta aplicación. Lo cierto es que me dio muchísima curiosidad por descubrir cuáles son dichas identidades.
¿Están preparados? Transgénero, trans, hombre transgénero, transgénero masculino, mujer transgénero o trans, transgénero femenino, persona trans, female to male, male to female, transexual masculino, transexual femenino, andrógino, androgynous, neutrois, dos espíritus, neither, no binario, genderqueer, no conformes con el género, género variante, género cuestionado, agénero, bigénero, género fluido, pangénero y otros.
Pueden respirar. Tampoco entendí a qué se referían la mayoría de estas identidades; pero en Estados Unidos y ciertos países europeos están disponibles para marcar al momento de crear un perfil en Tinder. Pueden buscar el glosario en Google, les dejo la tarea.