De los $951 millones anunciados por el Gobierno, más del 73% se debe a una sola operación de aumento de capital de una empresa ya establecida en el país. Los nuevos proyectos y las grandes obras ofrecidas todavía no llegan al país.
La Inversión Extranjera es la llegada de capitales o dinero de otros países para hacer obras nuevas de infraestructuras, abrir nuevas tiendas o industrias, expandir negocios ya existentes, y establecer proyectos para explotar actividades en crecimiento como la minería.
En otras palabras, se refiere a la inyección de recursos, e incluso tecnología, para que la economía de un país se haga más grande, genere más riqueza y empleo.
En este sentido, cualquier noticia de un aumento en la Inversión Extranjera normalmente es positiva; pero los últimos anuncios del Gobierno de Guillermo Lasso están teñidos de dudas, explicaciones a medias y contradicciones.
En primer lugar, en las redes sociales e internet se pueden revisar varias entrevistas del ministro de Producción, Julio José Prado, en donde resalta el gran apoyo de los empresarios nacionales con un incremento importante de la inversión local; pero a reglón seguido, el funcionario lamentaba y reconocía que la Inversión Extranjera estaba en número rojos y con proyección de cerrar en decrecimiento. Diario La Hora reseño esta realidad en una nota publicada el 29 de septiembre de 2022.
Sin embargo, apenas un día después, al final de la tarde del pasado 30 de septiembre de 2022, el ministerio de Producción sorprendió con un boletín de prensa en donde se anunciaba un aumento del 218% en la Inversión Extranjera durante los primeros seis meses de este año, con respecto a lo que se registró en igual periodo de 2021.
En total, según esa cartera de Estado, este tipo de inversiones sumaron $951 millones, es decir, $652 millones más que en el año pasado. Pero al mismo tiempo matizaba que alrededor del 99,7% se debió a aumentos de capital, es decir, a que empresas ya existentes en el país trajeron dinero para fondear y consolidar sus operaciones.
No son nuevos proyectos o grandes obras, como las incluidas en el portafolio de las tan citadas Alianzas Público- Privadas (APP), que tanto necesitan el país y el actual Gobierno.
Ese tipo de proyectos o grandes obras, junto con el establecimiento de nuevas fábricas, nuevas minas, o un nuevo hospital, se enmarcan en el concepto de la llamada Inversión Extranjera Directa (IED), y no es parte de las operaciones más societarias de aumento de capital, por ejemplo.
Siguiendo la pista de los millones de la Inversión Extranjera
En el portal de información de la Superintendencia de Compañías, se puede acceder a una base de datos que se llama Inversión Societaria Consolidada.
En esa base se puede verificar que, durante el primer semestre de 2022, se registró la constitución de 214 empresas extranjeras.
El valor de todas esas transacciones sumó $408.909. Más del 73% de esas nuevas empresas se crearon a través de Sociedades de Acción Simplificada (SAS), que es un modelo societario con menos trámites y más barato que los tradicionales.
Esto es positivo porque esos nuevos negocios tienen potencial a futuro de contribuir a la economía del país. Sin embargo, el salto en los montos de Inversión Extranjera se da cuando se revisa los aumentos de capital de empresas ya constituidas en el país.
Así, se ve que el 29 de junio de 2022, existe un aumento de capital por un poco más de $765 millones para la empresa Ruart Ecuador S.A.S (creada en 2020). Esta empresa tiene como accionista a una empresa uruguaya llamada Ruart S.A.
Según la descripción de la actividad económica, Ruart Ecuador S.A.S está dentro de las llamadas sociedades de cartera, es decir, es una empresa que se encarga de ser tenedora de activos o bienes de otras empresas relacionadas.
Hasta ahí es lo que se puede saber, y si se consulta al ministerio de Producción sobre de qué tipo realmente es la nueva inversión, la respuesta es que en la Superintendencia de Compañías está toda la información.
En otras palabras, más del 80% de los $954 millones festejados como nueva Inversión Extranjera se concentra en una sola operación que todavía está pendiente de aclararse para entender su real dimensión.
Sin embargo, si se analiza el último boletín de la balanza de pagos, elaborado por el Banco Central, en donde se registran las entradas y salidas efectivas de capitales en la economía ecuatoriana.
La cifra es menor que la comunicada por el ministerio de Producción. Así, el Banco Central establece que ingresaron $888 millones de nuevos capitales, $31,3 millones de utilidades reinvertidas y salieron $245,4 millones por el pago de préstamos de empresas extranjeras domiciliadas en Ecuador. El efecto neto entonces es de $676 millones.
De los $888 millones de nuevos capitales, más del 86% vino de Uruguay ($766,1 millones); seguido de China ($15,8 millones); Holanda ($14,1 millones); Suecia ($10,8 millones), y España ($7,5 millones).
Ricardo Rivas, economista, comentó que más flujos de dinero al país son positivos, y mecanismos como las SAS ha facilitado la constitución de empresas; pero se debe transparentar cuál es el real impacto de la Inversión Extranjera, y donde realmente se está generando nuevas posibilidades de negocio para que crezca la economía nacional. (JS)
La inversión extranjera creció 218% en el 1er semestre de este año. Es el nivel más alto de los últimos años, incluso más alto que antes de la pandemia.
Es el resultado de la estrategia de atracción de inversiones propuesta por el Presidente @LassoGuillermo y @Produccion_Ecu pic.twitter.com/8jzqLuTHw9
— Julio José Prado (@pradojj) October 1, 2022
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