Iglesia dice que la mediación es “urgente y necesaria” porque los efectos de la movilización se podrían agravar

SESIÓN. El miércoles 15 de junio de 2022, el presidente Guillermo Lasso convocó a una sesión de gabinete.
SESIÓN. El miércoles 15 de junio de 2022, el presidente Guillermo Lasso convocó a una sesión de gabinete.

Luis Pachala dijo que en los diálogos se plantean esquemas, metodología, no imposiciones. En el diálogo se esperan argumentos y no enunciados.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) y Amnistía Internacional (AI), se perfilan como mediadores en el impasse entre el Gobierno y la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), que desde el 13 de junio de 2022 mantiene una movilización indefinida.

La intervención de la Iglesia y organismos internacionales se plantea en momentos en que desde las esferas del Ejecutivo insisten en abrir canales de diálogo, algo que la dirigencia indígena tampoco descarta.

Monseñor Luis Cabrera, arzobispo de Guayaquil, exhortó a los involucrados a sentarse en una mesa de negociaciones, para intercambiar puntos de vista en beneficio de la población más vulnerable que vive momentos difíciles por la crisis económica.

Se mostró dispuesto a que la Iglesia participe como mediadora, como ocurrió en 2019, a pesar de que todavía no existe un pedido oficial de las partes en conflicto.  La Conferencia está a la expectativa de la solicitud que podría efectuar el Gobierno y el sector indígena.   “La mediación es urgente y necesaria porque si la partes no se ponen a dialogar las consecuencias que estamos viendo se van a agravar más”, alertó.

La Conferencia cuenta con personal especializado en temas de mediación y, en caso de que se concrete el pedido formal, está listo para actuar. Cabrera mencionó que en el programa de pacificación en los centros de rehabilitación social, la Iglesia también está presente con personas con experiencia en arbitraje.

La gestión de Pachakutik

Fue el movimiento Pachakutik el encargado de oficiar a la ONU, Iglesia y a Amnistía Internacional la necesidad de que sus representantes sean “garantes o veedores”.   Marlon Santi, coordinador de la agrupación política, consideró importante un “observatorio internacional” en caso de que el diálogo se concrete. “Todo depende de la voluntad política del Presidente de la República”, afirmó.

No obstante, Leonidas Iza, presidente de la Conaie, insistió ayer en los 10 puntos que planteó al Gobierno, el lunes 13 de junio. “Mientras no tengamos esta respuesta continuamos con las acciones de movilización en todo el territorio nacional”, dijo.

Enlace entre dirigencia indígena y gobierno

La respuesta del Gobierno a la “voluntad política” llegó de Luis Pachala, secretario de Pueblos y Nacionalidades Indígenas,   quien anunció que aceptarán la mediación de los organismos internacionales para el diálogo.

“De nuestra parte hay voluntad y esperamos que exista la misma voluntad de la otra parte, y que sea seria, sensible y rápida”, expresó.  Aseguró que desde el Ministerio de Gobierno se están generando protocolos de contacto y canales de acercamiento.

¿Cuál será el mecanismo una vez que se instale el diálogo?   “Nos sentamos en la mesa con los diez puntos y, sobre estos, habrá posiciones sustentadas y fundamentadas de la Conaie. Luego vendrá la contraparte del Gobierno”. En ese momento deberá haber un punto de equilibrio para llegar a un acuerdo, explicó.

 Se trabaja en la “arquitectura técnica”

Por lo pronto, los ministros de Economía, de Producción, entre otros trabajan en la “arquitectura técnica” de varios temas sobre todo en temas sociales y del campo. “Será una sorpresa en el momento oportuno, será importante y será anunciado por el Presidente”, dijo Pachala.

Aclaró que en un diálogo se debe plantear un esquema y metodología, no imposiciones. “En el diálogo se esperan argumentos y no enunciados. Debe haber más pragmatismo, porque las comunidades esperan cosas prácticas, gestiones, proyectos de riego, vialidad…”, dijo.

Toda negociación requiere de recursos económicos, por lo que también será necesario buscar las fuentes de financiamiento, que pueden generarse a través de reformas o apoyo internacional. “Prácticamente el camino está preparado”.

Pachala -quien se consideró como un “puente y un enlace” entre la dirigencia indígena y el Gobierno- aseguró que muchos de los puntos están listos para dar una respuesta. Mencionó, por ejemplo, el tema de los insumos agrícolas, educación bilingüe y salud indígena.  Esto es cuestión de tiempo.

Aclaró  que el Gobierno no fue el autor de las bandas que incrementan cada mes los precios de los combustibles.  “Lo que hizo el Gobierno fue congelar para los cuatro años subsiguientes el tema de los combustibles”.

Los insumos agrícolas, en cambio, dependen de factores externos. El Ecuador no produce los insumos. Sin embargo, se están tomando las medidas necesarias para conocer como está en tema de la compensación social.

Sobre los créditos y la condonación de deudas, dijo que eso implicará un impacto fiscal y, por tanto, debe ser discutido a fondo.

“Ya es hora de pacificar y de una vez por todas. Detener tantas pérdidas económicas millonarias”. (SC)

En contra de la movilización

La Comisión Nacional del Transporte instituida por el Gobierno hace un año se expresó en contra de la movilización que protagoniza la Conaie.  En una reunión en el Palacio de Gobierno este jueves 16 de junio, los delegados del transporte pesado, urbano, camionetas, taxis e interprovincial, manifestaron su compromiso de continuar tratando los temas de interés en espacios de diálogo y reafirmaron que la transportación no se prestará para actos de desestabilización. En la Comisión también están incluidos los delegados del transporte escolar. Sin embargo, Abel Gómez, presidente de la Federación Nacional de Cooperativas de Transporte Interprovincial (Fenacotip), comentó que su representante Oswaldo Guamán, no pudo trasladarse desde Guayaquil a Quito.

Lasso aseguró que este gremio ha sido escuchado desde el primer día de su gestión.  Ábel Gómez comentó que su postura fue no participar de las movilizaciones desde el inicio: “Necesitamos un país reactivado y que salga adelante”.  También dijo que no se prestarán para “manejos politiqueros que a la hora de la hora ponga en compromisos negativos a todos los ciudadanos y que desequilibran al país”.

El  presidente de la Federación Nacional del Transporte Pesado, Luis Felipe Vizcaíno, detalló que estos espacios de diálogo se vienen trabajando desde hace tiempo atrás  para generar mejores condiciones de trabajo, entre los cuales se encuentra la seguridad en carreteras y ciudades.

Para el sector del transporte  se prevé la creación de nuevas líneas de crédito.