Dolor en Pelileo por la muerte de dos niños

Rescate. Personal del Grupo de Operaciones Especiales recataron los cuerpos del fondo del tanque.

El llanto no se puede contener, vecinos y moradores del barrio Bellavista de la parroquia Benítez aún no pueden creer que los niños Bella Noemí y Edgar Mateo Yanchaliquín Tixilema de 10 y 7 años, respectivamente, hayan aparecido muertos.

“Ayer no más los veía jugando en su casa”, comentó una de las vecinas, quien aseguró que el destino le jugó una mala pasada a la familia.

Desaparecidos

Desde la noche del miércoles 16 de junio los vecinos ya conocían que los pequeños no aparecían, por ello los buscaban en cada rincón del barrio.

Sus familiares acudieron a la Policía, entidad que también se sumó a la búsqueda.

Muchas eran las hipótesis que pasaban por la mente de los familiares y vecinos, pero nunca imaginaron que encontrarían a los menores en el fondo de un tanque reservorio.

Según explicó Paulo Viteri, jefe de la Dinased, una vez realizado el rastreo y reconocimiento de los lugares donde pudieron perderse los niños, las alternativas se agotaban.

Es por ello que el personal de Dinased y del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) empezaron a planificar la inspección de los diferentes tanques reservorios que existen en la localidad.

Tragedia. Los vecinos y moradores del sector mostraron su consternación por la muerte de los infantes.

 

Encuentro

Unas sandalias flotando en el tanque reservorio fue el presagio de la tragedia.

Los uniformados rápidamente organizaron la inspección de aquel espacio con buzos del GOE, quienes aseguraron que la profundidad de este tanque con agua es de siete metros aproximadamente.

Los gritos desesperados de los familiares de los pequeños no se hicieron esperar cuando los uniformados encontraron los cuerpos.

Al parecer los pequeños llegaron al terreno porque tenía un sembrío de fresas, en el lugar habrían comido varias frutas.

Luego, tal vez por juego o curiosidad, cayeron al tanque reservorio de donde no lograron salir.

Dolor

“Solo Dios sabe qué fue lo que pasó o cómo sucedieron las cosas”, aseguró la abuela de los pequeños, quien no comprende cómo los niños fueron a parar tan lejos de su casa.

Con las sandalias que flotaban en el tanque, la abuelita explicó que muy cerca de la casa de los menores también hay tanques reservorios, incluso sin seguridades, pero que nunca sucedió nada.

María Tixilema, madre de los fallecidos, comentó a la policía que los menores se quedaron jugando en el patio de su casa mientras ella salía a trabajar.

No pasaron ni tres horas cuando regresó a la vivienda y no logro encontrarlos.

Rescate. Buzos del GOE entraron al tanque para sacar los cuerpos.

 

Levantamiento

En medio del dolor de sus familiares y la consternación de los vecinos y moradores, los pequeños fueron sacados del reservorio y posteriormente del terreno para ser trasladados a la ambulancia de medicina legal.

William Freire, fiscal de Pelileo encargado, indicó que se va a realizar el procedimiento correspondiente y para ello es importante desarrollar la autopsia y posteriormente una investigación que determinará lo ocurrido. (FCT)