Joven ambateño financia sus estudios siendo barbero

Abraham acomodó un pequeño espacio en su cuarto para cortar el cabello.
Labor. Abraham acomodó un pequeño espacio en su cuarto para cortar el cabello.

El joven ambateño Abraham Patiño aprendió a cortar el cabello para financiar sus estudios en la Universidad Técnica de Ambato.

Abraham Patiño es un joven ambateño que aprendió a cortar el cabello para generar recursos económicos que le permitan financiar su carrera universitaria.

Actualmente, el joven de 19 años cursa el periodo de nivelación para la carrera de Diseño Industrial en la Universidad Técnica de Ambato (UTA).

Apenas terminó el colegio, Abraham consiguió un cupo para estudiar en el Tena, sin embargo, por la falta de recursos económicos se vio obligado a regresar.

“Al mes gastaba unos 200 dólares que me financiaba mi mami, pero muchas veces no había dinero”, contó el joven, quien entrena artes marciales mixtas, disciplina que también enseñaba para ganar algo de recursos.

 

EL DATO
Actualmente Abraham estudia nivelación para ingresar a la carrera de Diseño Industrial.

 

Barbero

Abraham ingresó a un curso de barbería hace dos meses, aproximadamente, sus primeros clientes fueron sus compañeros de clases.

“Al principio la gente no te confía el cabello, a un pana le dije acolítame a cortarte el cabello, si me sale mal te invito un encebollado”, contó.

Afortunadamente, el corte fue del agrado de su amigo, quien empezó a recomendarlo con más personas y ahora sus clientes llegan hasta su casa.

Actualmente una esquina de su cuarto se transformó en una barbería, en donde ubica un gran espejo, una silla de la cocina y una mesa para todos los implementos necesarios para los cortes de cabello.

Las dos máquinas para cortar cabello que tiene actualmente las compró con sus ahorros, aunque su mamá también apoyó esta iniciativa.

“No es que gane mucho, pero si me sale para la ‘U’, pasajes, copias y demás”, aseguró.

A futuro Abraham dijo que su objetivo primordial es terminar su carrera y ser un buen profesional, aunque también le gustaría tener su propia barbería.

 

Deserción

Desde 2019 el promedio de matriculación de estudiantes en las universidades del país es del 36,44%, es decir, alrededor de 775.033 jóvenes han ingresado a una carrera de tercer nivel por año.

Sin embargo, de ese número de estudiantes matriculados, no todos terminan la carrera. Según un estudio de indicadores, publicado en la página de la Senescyt, existe un abandono en los primeros niveles.

El documento revela que la tasa de deserción universitaria pasó del 26,30%, en 2015, al 20,46% en 2023.

Además, según el estudio, la deserción es mayor en los hombres que en las mujeres. Señala que el porcentaje de hombres es de 21,28% y en mujeres de 16,02%. (RMC)