Control médico infantil: clave para el inicio escolar exitoso

Cuidados. El pediatra Ramiro Sánchez V. explica la importancia de un chequeo general de los niños previo al inicio del año escolar.

La salud de los niños es un aspecto que va más allá de evitar enfermedades. Según Ramiro Sánchez V., pediatra destacado de la Cruz Roja Ecuatoriana Tungurahua, un control pediátrico integral antes del inicio del periodo escolar puede tener un impacto directo en el rendimiento académico y el bienestar general de los niños.

El control pediátrico no es simplemente un chequeo de rutina. Este incluye un examen físico completo, complementado con exámenes adicionales que permiten al médico verificar el crecimiento y desarrollo normal del niño.

“El objetivo es detectar y prevenir problemas de salud que podrían afectar el desenvolvimiento normal del niño en el ámbito educativo”, explica Sánchez.

 

TOME NOTA 
La Cruz Roja Ecuatoriana Tungurahua ofrece atención médica completa con el programa ‘Niño sano a clases’, en el que se puede atender y recibir todos los exámenes necesarios.

Para tener en cuenta

Entre las evaluaciones clave se incluyen el examen físico general, que permite registrar el peso y la talla conforme a la edad, para valorar el estado nutricional del niño. También se revisa el carnet de vacunas y se recoge información adicional que el médico considere importante para completar la historia clínica del niño.

Además, el control pediátrico debe incluir exámenes de laboratorio. La biometría hemática, por ejemplo, es crucial para identificar la presencia o ausencia de anemia.

El coproparasitario es otro examen vital que detecta la presencia de parásitos, una condición que puede provocar una disminución en el rendimiento escolar debido a su sintomatología.

La visión y la audición también se evalúan mediante exámenes especializados, así como la higiene bucal, aspectos que pueden tener un impacto significativo en la capacidad de aprendizaje de un niño.

 

El objetivo es detectar y prevenir problemas de salud que podrían afectar el desenvolvimiento normal del niño en el ámbito educativo

Ramiro Sánchez V.

Pediatra

 

“Un niño que presenta alguna enfermedad no detectada y no tratada a tiempo puede sufrir un deterioro en su salud, una afectación emocional e incluso ausentarse durante cortos o largos períodos, lo que reflejaría una afectación en su desarrollo educativo”, advierte el pediatra.

Por lo tanto, es vital que los padres y cuidadores comprendan la importancia de realizar estos controles pediátricos antes del inicio del año escolar.

El especialista recalca que no sólo se trata de verificar el estado físico del niño, sino también de identificar a tiempo posibles problemas de salud que podrían influir en su capacidad para aprender y socializar con sus compañeros.

Es más, ciertos problemas de salud, como la anemia, pueden no mostrar síntomas evidentes en las primeras etapas. Pero, en el contexto escolar, estos pueden manifestarse como falta de concentración, cansancio extremo, y disminución en el rendimiento académico.

Los exámenes visuales y auditivos son igualmente importantes, ya que problemas no detectados en estas áreas pueden dificultar la participación del niño en la sala de clases y su capacidad para seguir el ritmo de las lecciones.

 

EL DATO
Para acceder a una cita en el programa ‘Niño sano a clases’ puede acercarse a la avenida 12 de noviembre y Quito o llamar al 032422218 para más información.

 

No hay que olvidar

En un país como Ecuador, donde las parasitosis son comunes en niños, el examen coproparasitario es crucial. La presencia de parásitos puede provocar una serie de síntomas que afectan la concentración y el rendimiento escolar del niño. Al detectar y tratar estos problemas a tiempo, se puede evitar que interfieran con el desempeño académico.

La higiene bucal también juega un papel crucial en la salud general y el bienestar. Problemas dentales pueden provocar dolor y malestar, lo que puede dificultar la concentración y el aprendizaje en la escuela.

Por lo tanto, hacer una revisión médica antes del inicio del año escolar es una inversión en la salud y el futuro de los niños. Es darles la mejor oportunidad para aprender y crecer, asegurándonos de que nada se interponga en su camino hacia el éxito.

Sánchez concluye en que la “prevención es la clave. No esperemos a que surja un problema de salud para actuar. Al tomar medidas proactivas, podemos garantizar que nuestros niños estén saludables y listos para enfrentar el nuevo año escolar de la mejor manera posible».

Así que, a medida que el año escolar se acerca, recuerde que el kit escolar de su hijo no solo consiste en lápices, libros y uniformes, sino también en un buen estado de salud que le permitirá aprovechar al máximo su año académico.