La transferencia de competencias en el sector turtico a 36 municipios que dentro del Plan Nacional de Descentralizaci, impulsa en Presidente de la Replica, es incompleta e incrementa el riesgo de que en los dos primos as provoque el colapso del turismo nacional, ases como lo concibe la presidenta de la Cara de Turismo de Bas, Carmen Luna, al referirse que este cant es el ico que vive en un 100% de esta actividad.
Al descentralizar icamente las funciones de los Ministerios y mantener intactas las obsoletas estructuras municipales, se estcreando un cuello de botella espantoso que, dadas las urgencias de infraestructura bica que las poblaciones exigen a los municipios, las policas y acciones turticas ser relegadas a timos planos, como actualmente sucede, expresa Luna.
Indica adem que si con las funciones y estructuras actuales los municipios no avanzan o si lo hacen es muy lentamente, qupodemos esperar cuando deban absorber las funciones de cuatro ministerios m.
Si no se motiva o exige a los municipios que en forma coherente a la polica nacional de descentralizaci, inicien procesos similares, se estcreando en cada municipio a m de cuellos de botellas que har m lenta su gestaci, una suerte de alcaldes emperadores y la tan mentada participaci ciudadana seguirquedando bajo el capricho de las veleidades e intereses polico-partidistas, acota Luna.
Es imperativo que los actores sociales apoyemos y reforcemos las estructuras municipales mediante un proceso urgente de descentralizaci de los municipios que permita la participaci ciudadana sin que ta sea manipulada, pero para ello es necesario que la descentralizaci que impulsa el Gobierno Nacional llegue tambi a los Gobiernos Seccionales.
Caso contrario, el fracaso que pueda darse, especialmente en el ea turtica que es la que encabeza la descentralizaci, terminarcon esta actividad en los primos dos as cuando se sientan los estragos de una descentralizaci incompleta, que en inicio se asemeja m a una liberaci de responsabilidades, sino no se aplica un concepto integral de la misma, concluyCarmen Luna.