Noboa ha fracasado

Salvatore Foti

El presidente Daniel Noboa llegó al poder con un altísimo índice de aceptación y confianza por parte de los ecuatorianos. Sin embargo, su luna de miel con la población parece haber terminado muy pronto, pues no se explican de otra manera tanto los resultados de la consulta, donde no logró la aprobación en las 11 preguntas tal como era su objetivo, como los cambios abruptos en su gabinete que responden justamente al mal momento y a la improvisación  que vive y que hasta ahora lo alejaría de una posible reelección.

Y es que Noboa ha fracasado en cada una de las aspiraciones de la población, que iban desde los temas de seguridad hasta los temas económicos, en donde se suponía que algo iba a hacer. El supuesto plan Fénix no logra hasta hoy devolvernos la tranquilidad a los ciudadanos, quienes no vemos ninguna coordinación entre Policía y FF.AA., o peor aún, su presencia en las calles donde seguimos abandonados y siendo víctimas de secuestros y extorsiones. Mientras que en lo económico, además de subirnos el IVA, perjudicándonos a todos, se ha añadido la imperdonable falta de luz a la cual nos vemos sometidos y que comporta pérdidas millonarias a lo largo y ancho del país en el año 2024 después de Cristo .

El modelo de Noboa, hasta aquí, ha fracasado porque sencillamente no ha sido capaz de demostrar que  tiene ni  un modelo ni una visión, y esto es lo más triste de todo, pues el terrorismo ha llegado a matar hasta alcaldes sin que haya una respuesta adecuada del Estado, quien prefiere ensañarse con la ex ministra de Energía y decenas de funcionarios de la empresa electrica que de repente se vieron acusados nada más y nada menos que de sabotaje.

Para rematar, tenemos índices de deserción escolar que harían temblar a cualquier gobierno del mundo mundial, excepto, claro está, al nuestro, que sigue en campaña sin entender que la juventud no debe ser explotada para sacarle el voto sino que debe, sobre todo, ser cuidada, puesto que los sicarios menores de edad son los mismos que hoy se ven obligados a abandonar los estudios.

En fin, el presidente debe empezar más obras y menos Tik Tok, pero nadie le quiere decir nada porque ya se acostumbró a mandar a La Roca a los que le molestan o cuestionan.