Turismo en Quito crece ‘a paso lento’

El sector turístico pide apostar por el turismo de calidad y de alto gasto
El sector turístico pide apostar por el turismo de calidad y de alto gasto

Para 2023, la ciudad espera recuperar el número de turistas recibidos en años previos a la pandemia. ¿Qué le hace falta a la ciudad para potenciar el turismo?

Su cara luce enrojecida por el fuerte sol. Las nubes se abrieron para dar paso al característico calor de medio día en Quito.

Este es el cuarto mes de Jimmy Groom, de 22 años, en la ciudad. El clima de Quito fue una de las primeras cosas a las que tuvo que acostumbrarse, aunque, según explica no fue difícil.

«El calor es bueno, pero el clima puede variar mucho. Aunque no estoy acostumbrado a esos cambios tan repentinos, aquí no se sienten climas extremos como donde vivo», dice.

Groom llegó a la ciudad por un intercambio estudiantil universitario. Durante los cuatro meses que ha estado en Quito, asegura que ha logrado disfrutar de los diferentes atractivos que ofrece la ciudad y también el país.

Desde la naturaleza, en el noroccidente, hasta los barrios urbanos y el Centro Histórico, «Quito es una ciudad muy rica y diversa como para visitarla y conocerla a fondo», dice.

Turismo en cifras

Así como Groom, alrededor de 161.857 turistas han llegado a la capital entre enero y marzo de 2023.  Esto representa un crecimiento de apenas un 1% en relación a las cifras alcanzadas en 2019, antes del inicio de la pandemia.

Para María Cristina Rivadeneira, gerente de Quito Turismo, estas cifras son alentadoras. Las proyecciones de la institución apuntan a que la ciudad termine de recuperarse del golpe de la pandemia este 2023.

«En 2019, Quito recibió alrededor de 684 mil turistas. Se espera que este año alcancemos los 696 mil turistas«, explica.

En promedio, en 2022, la ciudad recibió alrededor de 30 mil turistas mensuales. Según datos de Quito Turismo, en lo que va del año el promedio ronda los 50 mil turistas y se espera superar los 70 mil en los últimos meses de 2023.

Esto, sin embargo, para expertos como Diego Vivero, es insuficiente. «Nos han pedido al sector turístico que resistamos y lo hemos hecho, pero ya no aguantamos más. Ya no es posible resistir. Las deudas sobrepasan los ingresos y ya no hay quien te preste. En 2023 hay negocios que han mantenido las cifras de 2022 o incluso las han disminuido», dice.

Así ha evolucionado la cantidad de turistas que llegan a la ciudad. Fuente: Quito Turismo
Así ha evolucionado la cantidad de turistas que llegan a la ciudad. Fuente: Quito Turismo

Baja estadía

Otro de los problemas que acarrea la ciudad y se ha mantenido constante es la baja tasa de estadía de los turistas.

En Quito, un viajero permanece en promedio 1,5 noches. Esto posiciona a la capital como un destino turístico de paso. Según expertos, quienes llegan a la ciudad la ven solo como un destino antes de las Galápagos.

Rivadeneira explica que la ocupación hotelera, al iniciar la administración municipal, era alrededor de 24%. Actualmente, asegura, esta cifra ha alcanzado el 61,25% con un gasto promedio de $97.

«Nos hemos recuperado. Para aumentar la cantidad de noches que los turistas se quedan en Quito, tenemos diferentes estrategias que buscamos implementar. Entre estas, acciones sostenidas en cuanto a promoción y desarrollo», dice.

Turismo de experiencias

Para Diego Vivero, «el promedio de noches es crítico. Estas cifras se han mantenido por mucho tiempo».

Explica que, entre las propuestas para solucionar este problema es ir más allá de los atractivos que tiene la ciudad.

«Creemos que a Quito le faltan experiencias, saber qué hacer en la ciudad. Cuando las ciudades tienen qué hacer, los turistas buscan más tiempo para quedarse», dice.

Explica que la diferencia entre quedarse una noche, dos o tres en una ciudad puede basarse en conseguir una reserva en un restaurante con una estrella Michelin, por ejemplo. O no solo visitar la plaza de San Francisco, sino «ir a un concierto de música clásica en San Francisco».

«Si mañana tienes una agenda ciudad, para que los turistas sepan con tiempo qué hacer, eso te genera más estadía y más divisas. Esto generará ganancias para hoteles, taxis, buses y otros sectores también», detalla.

Con una agenda fija, que abarque los 365 días del año, las agencias y operadoras turísticas podrían ofrecer planes de visita a Quito que incluyen conciertos y otros eventos y, de esta forma, recomendar que los visitantes permanezcan en la ciudad más de dos o tres días.

Una de las apuestas a las que apunta Vivero es a la gastronomía. Asegura que generar experiencias que estén ligadas con la gran diversidad gastronómica qué tiene la ciudad.

Explica que estas propuestas ya las han presentado al alcalde electo, Pabel Muñoz. Uno de los retos de la nueva administración será hacer crecer las cifras del turismo en la ciudad.

Quito Turismo, desde la administración saliente, asegura que se ha estado trabajando ya en la generación de una agenda de actividades de ciudad de la mano con el sector privado, lo que incluye guías de zonas urbanas y rurales.

«Solo en la ruralidad tenemos más de 1.000 espacios que visitar», asegura Rivadeneira. «Este es el primer año de operación del Centro de Convenciones Metropolitano, el más grande del país. Esto abre la oportunidad para captar eventos, congresos, convenciones».

La apuesta gastronómica ha sido clave en la administración desde el programa Quitonómica, que ha juntado a chefs y restaurantes de la ciudad para presentar eventos y ofertas innovadoras en el ámbito culinario para quienes llegan a la ciudad.

Inseguridad golpea al turismo

La percepción de inseguridad y el aumento de asaltos en la ciudad también ha golpeado las actividades turísticas en Quito. Según Vivero, las más afectadas han sido las actividades nocturnas. Explica que, en algunos casos, las ventas de algunos establecimientos se han reducido en un 50%.

«El sector está afectado por la imagen que incluso nosotros mismos nos hemos encargado de dar al Ecuador, que es un país inestable. No solo en tema delincuencia sino también amenazas, paros, manifestaciones e inestabilidad política«, asegura. «Esto hace que personas abandonen sus negocios y se pierdan empleos».

Sus acercamientos, desde el sector y las Cámaras, con Pabel Muñoz también han incluido el factor seguridad. Han pedido al alcalde electo trabajar junto con la Policía y las instituciones encargadas para brindar seguridad en la ciudad.

El experto apunta a que la ciudad pueda garantizar las condiciones de los turistas y la calidad de los servicios para potenciar la llegada de visitantes de alto gasto. (ECV)

Feriados han traído más de 800 mil turistas nacionales a la ciudad. Esto representa un gasto de alrededor de $5 millones