Sácale provecho a tu basura orgánica

COMPOSTAJE. Quito produce alrededor de 1.500 toneladas de basura orgánica al día.
COMPOSTAJE. Quito produce alrededor de 1.500 toneladas de basura orgánica al día.

Este tipo de desechos es el más común y uno de los más contaminantes en la ciudad. Conoce sus daños y cómo evitarlos.

Juliana Carrera tiene 47 años y vive en el norte de Quito. Su casa cuenta con un «pequeño patio» en el que empezó una huerta urbana.

«Cuando llegué a la casa pensé en algunas opciones para aprovechar el patio. Siempre quise cultivar en mi casa, así que decidí empezar con tomates y plantas fáciles de cuidar como el perejil», dice.

En este proceso, buscó opciones para sacar adelante su cultivo. Entre estas, fabricar su propio compostaje para abonar la tierra.

 «Se me murieron las primeras plantas, pero fue un aprendizaje. Con el compost y algunos errores logré sacar adelante el cultivo», cuenta.

Hoy, aprovecha parte de los desechos orgánicos que genera en su hogar para alimentar a sus plantas, «son como mis hijas».

Este tipo de actividades y procesos caseros no solo pueden ser útiles para producir parte de tu comida y pasar el tiempo, también aportan a reducir gases de efecto invernadero y otros contaminantes.

 Basura orgánica

Quito genera alrededor de 2.200 toneladas de basura al día. El 65% corresponde a desechos orgánicos de todo tipo. Esto se traduce en, aproximadamente, 1.500 toneladas de residuos de origen orgánico que llegan al relleno sanitario.

Cáscaras, sobras de comida o alimentos dañados se convierten en residuos que generan grandes efectos contaminantes en las ciudades.

Gustavo Aguilar, experto en ambiente, cuenta que la descomposición de este tipo de residuos, cuando no tiene tratamiento adecuado, genera grandes cantidades de metano. Este gas es 10 veces más contaminante que el dióxido de carbono y aporta directamente al efecto invernadero y al cambio climático.

A esto se suma la generación de lixiviados, líquidos resultantes del proceso de descomposición. Estos son altamente contaminantes para el suelo y las fuentes de agua, lo que puede disminuir en gran manera la calidad de vida de zonas cercanas a los rellenos sanitarios.

Además, este proceso también cambia directamente la calidad del aire.

«Hablamos mucho del reciclaje, lo que es excelente y debe ampliarse aún más esta práctica. Pero esto no es lo único que podemos hacer para reducir nuestra huella de contaminación. A veces menospreciamos los efectos que puede tener la basura orgánica, pero es algo que debemos tratar ya», dice Aguilar.

Aprovechar este tipo de residuos desde casa puede aportar en gran medida a reducir este tipo de efectos ambientales. Pero, ¿cómo hacerlo?

Las alternativas

En Quito hay diferentes opciones para aprovechar tus residuos orgánicos y reducir tu huella de carbono. Una de estas es el EcoCentro Sur, a cargo de la Empresa Metropolitano de Gestión de Residuos Sólidos de Quito (Emgirs). Se trata de un espacio creado para concientizar a la ciudadanía y enseñar cómo aprovechar los residuos orgánicos desde sus casas.

En este espacio, ubicado en el parque Lineal de Solanda, en el sur, los quiteños pueden aprender a realizar compostaje y entregar sus residuos orgánicos para que estos sean aprovechados.

Según información de Emgirs, 350 kilos de estos desechos son recuperados mensualmente por este espacio. Estos se procesan para convertirse en compostaje (abono 100% orgánico) y sostener los cultivos del centro.

Las cosechas producidas en el EcoCentro son entregadas mensualmente al Banco de Alimentos de Quito. De esta forma, estos alimentos pueden llegar a personas en condiciones de vulnerabilidad.

Otra opción es buscar iniciativas como la que impulsa Anuna. Esta organización ofrece servicios de recolección gratuita de residuos orgánicos y actualmente atiende a alrededor de 1.500 hogares inscritos (para más información da clic aquí).

Quienes forman parte del programa reciben un contenedor de basura vacío y limpio, al que no se le debe poner funda. En este espacio se puede depositar todo tipo de desechos orgánicos domésticos.

Una vez por semana, una unidad de recolección de Anuna pasa por los domicilios de los usuarios para retirar el contenedor y cambiarlo por uno limpio.

Anuna procesa estos residuos para fabricar compost, que luego se vende a agricultores y empresas. Desde finales de 2020, la empresa ha procesado más de 350 toneladas de compost.

Estas alternativas pueden complementarse con un cambio de hábitos en casa. Acciones como contar con un recipiente o tacho específico para desechos orgánicos puede ser un primer paso. (ECV)

El EcoCentro Sur atiende de lunes a viernes de 08:00 a 17:00.