Advierten que si la alternativa para generar recursos son los impuestos el gobierno nacional debe mostrar gestión y paralelamente trabajar en alternativas que generen superávit en la economía.
En Sudamérica dos nuevos gobiernos avanzan enfrentando sus propias crisis particulares. En Argentina, Javier Milei desafía al modelo kirchnerista y ha propuesto una serie de reformas económicas y políticas contundentes. En Ecuador, Daniel Noboa toma decisiones para combatir la delincuencia y el narcotráfico, mientras busca aprobar el aumento del IVA para hacer frente a la emergencia y la crisis fiscal.
El modelo de Milei busca impulsar un cambio estructural en una sociedad que durante casi todo este siglo ha sido gobernada por el modelo kirchnerista que se instaló en 2003, y que solo salió del poder cuatro años durante la presidencia del conservador, Mauricio Macri, entre 2015 y 2019.
A pesar de las críticas y los llamados a protestas y paros, la conflictividad no se ha apoderado de las calles de Argentina como en el pasado y en este momento en el Congreso busca lograr los acuerdos necesarios para que la llamada Ley Ómnibus consiga el apoyo y avance a la discusión en la cámara del Senado.
La Ley Ómnibus plantea cambios en diversas áreas, económicas, medioambientales, sociales y hasta en la estructura del Estado, con la que se pretende dar un giro a la política argentina.
Lucha parlamentaria
Por su parte, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, también protagoniza una nueva batalla en la Asamblea Nacional, aunque los primeros dos proyectos de leyes económicas urgentes lograron el apoyo de importantes mayorías, que avalaron la Ley de Eficiencia Económica y la Ley de Emergencia Energética, sus nuevas propuestas han puesto a prueba la alianza legislativa.
Durante una entrevista concedida este 30 de enero de 2024 a Ecuavisa, el primer mandatario hizo un llamado a los asambleístas para que entiendan la gravedad que vive el pueblo ecuatoriano y reiteró su llamado para que apoyen tanto la propuesta de reforma al Impuesto al Valor Agregado (IVA) y al proyecto de Ley de Extinción de Dominio, como fórmulas para lograr los recursos necesarios para financiar el “conflicto armado interno” y el combate contra la delincuencia.
Ambas propuestas están poniendo a prueba la alianza legislativa que permitió la designación de las autoridades del Parlamento junto al Partido Social Cristiano (PSC) y la Revolución Ciudadana (RC).
“Esas bancadas deben reflexionar, que es lo que está pasando en Ecuador, tenemos una crisis fiscal y estamos en una lucha contra el terrorismo, tenemos que respaldar a la Policía y las Fuerzas Armadas”, reclamó el mandatario.
Hablar con honestidad
El economista y representante del pensamiento libertario en Ecuador, José Alvear, destacó que la grave crisis que atraviesa Ecuador obliga a Noboa a tomar decisiones en las que deberá ser inflexible, sobre todo con aquellos grupos “interesados que buscan sacar beneficios particulares y no beneficiar al país”.
En este sentido, Alvear destacó que una de las características del liderazgo de Javier Milei en Argentina, ha sido la honestidad, por lo que pidió al presidente Daniel Noboa, hablar con claridad al ecuatoriano.
“La virtud del presidente Milei en Argentina fue siempre decir la verdad a la gente, no hablar con cálculo electoral. Ha sido una de sus mayores virtudes. Él, de entrada, nunca hipotecó sus convicciones por tratar de llegar al objetivo final, sino que más bien intentó entusiasmar a los argentinos con un modelo de país en el cual él está 100% convencido”, apuntó Alvear.
Desde su punto de vista, es este accionar y coherencia, “lo que hace que, a pesar de que Argentina hoy está pasando por momentos dificilísimos, la gente le tenga paciencia a este presidente, que es el abanderado de la libertad en la región”.
Los impuestos
Alvear detalló que si bien dentro del manual libertario los impuestos no son la estrategia para generar un país próspero. En la realidad que vive Ecuador, que es un país quebrado y con un Estado obeso, debe revisarse la posibilidad de buscar nuevas alternativas.
El economista y representante libertario destacó que “con los niveles de aceptación, la ciudadanía quizás podría tolerar un alza en el IVA, puntualmente, y si es que viera también que el Gobierno lleva a la práctica eso de reducir el aparato estatal”.
Acotó que dentro de la cuota de sacrificio que debe realizar el Estado podría proponerse a la Corte constitucional una pregunta que permita la posibilidad de desaparecer a las prefecturas que representan $3.097 millones al año, o la posibilidad de eliminar al Consejo de Participación Ciudadana que representa casi $10 millones al año.
A pesar de las críticas que ha levantado la propuesta de solicitar una moratoria a la salida del ITT del Bloque 3 del Yasuní, Alvear manifestó que los ecuatorianos ante la nueva realidad del país deberían “volver a considerar, si se debe dejar el petróleo bajo tierra del campo del ITT, que representa $1.300 millones al año. Hay dinero que podríamos empezar a ahorrar”.
En dado caso que la decisión sean los impuestos, Alvear dejó claro que el Gobierno debe “empezar a sembrar políticas de Estado que a la larga generen superávit y no déficit fiscal. Me refiero a la transición de combustibles líquidos a gas natural, porque cuando esto exista, el Estado se va a ahorrar más o menos $3.000 millones, porque no serán necesarios los subsidios”. (ILS)
Rechazar el oportunismo y cálculo político
José Alvear no dejó pasar la oportunidad para criticar la actitud asumida por los partidos políticos PSC y su líder, Jaime Nebot, y la Revolución Ciudadana (RC) de Rafael Correa, indicando que ambas organizaciones parecen moverse bajo los cálculos políticos y no observando la crisis nacional.
“No estoy de acuerdo con la postura de los socialcristianos, salen hoy diciendo que no hay que subir impuestos, pero, sin embargo, fueron los abanderados del impuesto al cheque. Dicen no a los impuestos, sin embargo, sí a los subsidios que aumentan el déficit fiscal del Estado”, detalló.
Alvear dejó claro que la actitud del PSC es “no a los impuestos porque voy a entrar en un año electoral, pero sí a los subsidios, porque no voy a ser Gobierno, estas son las contradicciones y realmente lo que genera más frustración de los actuales caudillos en la política”.
Sobre Rafael Correa destacó que “dice que no va a apoyar; sin embargo, cuando fue el terremoto, subió los impuestos. Entonces, cuando les toca a ellos, sí, cuando ellos tienen que sumarse para empujar la carreta hacia adelante, ahí no”.
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