Conoce la historia de Neisi, quien sufrió bullying e “intentaron maltratar”

FAMILIA. El triunfo fue dedicado a su madre y hermano, quienes fallecieron.
FAMILIA. El triunfo fue dedicado a su madre y hermano, quienes fallecieron.

Walter Llerena, quien formó y crió a la deportista, denuncia que Neisi fue maltratada y quisieron manipularla. Ella respondió con una medalla de oro.

Toda una vida de pie, a pesar de las dificultades y las dolorosas pruebas de la vida. Pero, al momento de festejar su medalla de oro olímpico, Neisi Dajomes se puso de rodillas en el podio, se le aguaron los ojos, miró al cielo y enseñó su mano derecha escrita con las palabras: “Mamá y hermano”.

La pesista ecuatoriana, oriunda de Shell, en la provincia de Pastaza, inició su historia como deportista con todo en contra. Walter Llerena, quien fue su primer entrenador, recordó que la tuvo que llevar a vivir a su casa porque la situación económica de ella era precaria.

Junto con Mayra Hoyos, la otra entrenadora de la campeona, se preocuparon no solo de que crezca como deportista, sino también de que se alimente bien y estudie desde que la acogieron, a los 10 años.

Dajomes sufrió de ‘bullying’

“A Neisi le molestaban cuando era una niña. Le decían que va a parecer hombre por levantar pesas o que se va a quedar chiquita por eso. Sufrió, pero nunca dejó de trabajar”, recordó Llerena, en una entrevista desde Aruba.

Antes de ganar la medalla de oro olímpica, Dajomes fue tres veces campeona mundial juvenil. Además de obtener títulos bolivarianos y panamericanos. Sin embargo, en medio de tantos triunfos, tuvo que sobrellevar en 2018 la muerte de su hermano Xavier Palacios, quien fue el primero que le impulsó a ser pesista.

En 2019, apenas unos meses antes de los juegos panamericanos de Lima, también perdió a su madre, Ofelia.

Llerena resaltó que el espíritu guerrero y la visión positiva nunca han abandonado a Neisi Dajomes, incluso en esos momentos dolorosos.  Por eso, su entrenador la califica como una “mujer excepcional”, que no pierde la alegría.

 “Es una chica alegre. Siempre quiere verse bien, llamar la atención por sus atuendos, siempre se arregla, busca llamar la atención con sus peinados y todo. Es muy carismática”.

 ‘A Neisi le quisieron poner el pie’

Minutos después de colgarse la medalla de oro, Neisi Dajomes dijo sentirse muy orgullosa. “Soy la primera (mujer) en obtener una medalla olímpica. No tengo palabras para describirlo, mis metas eran grandes, siempre he tenido ambición”.

Y añadió: “No fue nada fácil, para llegar a Tokio tuve que pasar por muchas dificultades, pero el sacrificio, el trabajo y el coraje valieron la pena”.

Ese camino complicado hacia la cima incluyó, según Llerena, el poco apoyo y los malos tratos desde la dirigencia deportiva del país. “Esta medalla de oro es la respuesta de Neisi Dajomes al maltrato y la manipulación de la que fue víctima por parte de la Federación Ecuatoriana de Levantamiento de Pesas. Le quisieron poner el pie muchas veces y no se dejó”, puntualizó

A la campeona le quisieron obligar a cambiar de entrenador, y hasta pretendieron imponerle dónde preparase. Llerena apunta directamente a Luis Zambrano, titular de la federación.

No se dejó ‘manipular’

“Sabemos la clase de ‘dictadorzuelo’ que es este Zambrano. Le quisieron llevar a Guayaquil a entrenar y obligarla a cambiar de entrenador. Neisi dijo que primero muerta hacía eso. No se dejó manipular”, acotó

Llerena recordó que hace cuatro años presentó un proyecto para que, en conjunto con Alexei Ignatov (actual entrenador de Neisi), armar un equipo de trabajo para conducir a tres o cuatro pesistas.

Esa propuesta no recibió apoyo de la dirigencia, y para los Juegos Olímpicos de Tokio, a pesar de las gestiones de la campeona, Llerena no fue autorizado a viajar.

“El Comité Olímpico me negó la posibilidad de viajar junto a Neisi Dajomes. La acompañé desde el inicio de su carrera, pero prefirieron llevar a dirigentes y amigos”, concluyó

Walter Llerena lamentó que, ante la falta de apoyo, alrededor de 10 pesistas ecuatorianos hayan desertado del país y ahora están compitiendo para Estados Unidos.
Los padres de Neisi Dajomes fueron refugiados colombianos, que hace 25 años llegaron a Ecuador.

“Esta medalla se la dedico a Dios, a mi mamá y a hermano y a mi entrenador Alexei”. Neisi Dajomes