Esta realidad ha provoca cambios en la rutina diaria y menos salidas a lugares de entretenimiento. Las horas de mayor ocurrencia de robos es entre las 13:00 y 16:00.
En la actualidad, la mayoría de estudiantes universitarios han retomado sus clases presenciales, sin embargo, la inseguridad también afecta a este grupo de ciudadanos, provocando que modifiquen sus horarios, rutas y salidas de entretenimiento para no ser víctimas de la delincuencia.
Oikonomics Consultora Económica presentó el estudio “Percepción de Seguridad en Quito”, el cual fue publicado en el mes de abril de 2023. En ese estudio se establecía que más de la mitad de las familias quiteñas consumen menos por el aumento de la delincuencia.
Ahora, como complemento, se realizaron encuestas se realizaron del 3 al 5 de junio de 2023, logrando recopilar 233 encuestas efectivas. En cuanto a las características del encuestado, el 4% fueron estudiantes menores de 18 años y el porcentaje restante tenían edades entre 18 a 25 años. Además, se obtuvo el mismo número de encuestas por parte de hombres y mujeres.
El objetivo fue conocer cómo los estudiantes universitarios residentes en la capital han modificado su comportamiento después de ser víctimas de robo o de intento de robo.
De esta forma, del total de estudiantes encuestados el 35% había sido víctima de robo o intento de robo en 2023. En el caso de las mujeres, el 71% de ellas señaló que le habían intentado robar, mientras que, sucede algo distinto con los hombres, quienes indicaron en su mayoría (63%) que fueron víctimas de robo.
En esta misma línea, existen diferencias entre hombres y mujeres en el número de veces que han enfrentado alguna vivencia relacionada a actos de robo.
La mayoría de hombres y mujeres han sido víctimas de robo o de intento de robo una vez, no obstante, es mayor la proporción de mujeres (43%), comparada con la de hombres (31%), que ha enfrentado esta situación más de una vez.
¿ Dónde y a qué hora ocurren con mayor frecuencia los robos?
El 60% de estudiantes menciona que fue víctima de la delincuencia en el Norte de la ciudad, zona en la que existe también la peor percepción de seguridad de acuerdo a estudios previos.
Así mismo, los estudiantes han identificado 3 lugares en los que, usualmente, ocurren este tipo de acontecimientos, estos son: transporte público (42%), en la calle (37%) y sitios destinados al entretenimiento o donde existe aglomeración de personas (12%).
Además, independientemente del lugar del robo o intento de robo, la hora a la que ocurre este tipo de sucesos es entre la 13:00 y las 16:00, es decir, tienen lugar a plena luz del día.
Dada la temporalidad en la que ocurren estos acontecimientos, el 78% de los estudiantes indicó que existieron otras personas que presenciaron el hecho, sin embargo, el 62% de ellas no ofreció ningún tipo de ayuda después del suceso.
La forma de reaccionar de los estudiantes tampoco es distinta a la de los ciudadanos, puesto que, el 73% de ellos no solicitó ayuda a la policía, militares, bomberos o médicos.
Por el contrario, el 65% de estudiantes decidió tomar medidas por sí mismos y optaron por modificar sus horarios, rutas y salidas de entretenimiento para evitar ser víctimas de la delincuencia.
¿Cómo han cambiado las rutinas de los universitarios frente al aumento de la delincuencia?
La decisión de modificar sus actividades habituales depende mucho de sexo y lugar donde han sido víctimas de la delincuencia.
En el caso de sexo, es mayor la proporción de mujeres (68%), comparada con la de hombres (63%), que ha decidido cambiar su rutina.
Esto, posiblemente se deba a que una mayor proporción de ellas ha sido víctima de robo o intento de robo más de una vez.
En lo que respecta a los lugares, el 56% de los estudiantes que presenta una vivencia relacionada a actos de robo en el transporte público ha decidido modificar su rutina, esto a pesar de ser el lugar donde sucede el mayor número de robos o de intento de robos.
Esto posiblemente ocurra porque los estudiantes no tienen otras opciones de transporte para movilizarse hasta sus universidades.
Una particularidad, es que a pesar de que el 12% de los estudiantes enfrentó alguna situación de robo en lugares destinados al entretenimiento o con gran aglomeración de gente, es mayor la proporción de jóvenes (86%) que estarían dejando de acudir a estos lugares, comparado con lo visto en el transporte público. (JS)