Finalmente, luego de dos intentos fallidos en los últimos 12 años, el líder mexicano de izquierda, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha sido elegido presidente de su país por más del 50% de los votantes.
Hay que recordar que Donald Trump llevaba sólo diez días como presidente de Estados Unidos en enero de 2017, cuando AMLO anunció una gira por este país para “defender a los migrantes”.
En su viaje, el entonces precandidato acusó a Trump y a sus asesores de hablar de los mexicanos “como Hitler y los nazis se referían a los judíos” y de apoyar “una campaña de odio que es neofascista”.
La situación generó polémica y sospechas de que López Obrador buscaba utilizar el alto rechazo que Trump genera para lograr votos para sí mismo, algo que negó. Pero a medida que se afianzó en la campaña, muchos vincularon su apoyo popular con lo que hace Trump al otro lado de la frontera.
Por otra parte, si la derecha se está abriendo espacio en Latinoamérica, entonces uno se pregunta: ¿Por qué ganó AMLO? La respuesta es simple: la sociedad mexicana está cansada de sus políticos de siempre y de los enormes niveles de corrupción en la administración pública, mientras no se repone de los espeluznantes y bárbaros embates del narcoterrorismo.
López Obrador ha dicho algo que vale la pena tener en cuenta: “No se va a actuar de manera prepotente, no se va a imponer nada. Nada por la fuerza, todo por la razón y el derecho”. Ojalá cumpla y que sus promesas no sean una utopía más de esas en las que se ha vuelto especialista la izquierda.
Dios no recibe respuestas con palabras”. Lao-tsé Filósofo chino (570 aC-490 aC)
Debemos obrar como hombres de pensamiento; debemos pensar como hombres de acción”. Henri Bergson Filósofo francés (1859-1941)