La semana empezó con dos posibles arremetidas al núcleo duro del correísmo y su cabeza más notable, es decir, la del expresidente Correa, otra vez de gira por el país para convencer a sus seguidores de que voten ‘No’ en la consulta popular. Por un lado, la Contraloría conformó una veeduría para examinar la deuda del Estado de 2012 a 2017 y, por otro, el Fiscal General también hizo lo suyo al respecto.
Declaró a los medios de comunicación que en cuanto a Glas hay varios expedientes en investigación sobre más casos de corrupción y que no se descarta pedir la versión de Correa. Los veedores convocados por la Contraloría vigilarán la transparencia de sus exámenes especiales de control a la deuda pública interna y externa.
De ‘revancha política’ calificó el expresidente esta acción. El miedo agobia al núcleo duro del correísmo. Los hechos a develarse le han hecho prender las alarmas. Luego de la consulta podría quedar abierto el camino para que el informe de la veeduría sea aún mucho más trascendente. La supuesta revolución de la década pasada podría develarse como: una gran y siniestra estafa a millones de conciudadanos que confiaron en ella.
El cuadro estaría completo si se decidiera, por la vía legal adecuada, revisar también los informes del excontralor, hoy prófugo de la justicia. Sus informes sirvieron para que la transnacional brasileña Odebrecht pudiera llevar adelante ‘sin despeinarse’ su sistemático soborno a funcionarios del régimen anterior. La veeduría tendría una oportunidad histórica de prestar un gran servicio al país.
¿Qué es lo que más quiero hacer? Esto es lo que no debo dejar de preguntarme ante las dificultades”. Katherine Mansfield Escritora neozelandesa (1888-1923)
Después de escalar una montaña muy alta, descubrimos que hay muchas otras montañas por escalar”. Nelson Mandela Político sudafricano (1918-2013)