Javier Milei celebra el logro de una «hazaña histórica» luego de conocer los resultados del ajuste en Argentina

Trámite. El presidente electo de Argentina, Javier Milei, presentó su renuncia como diputado.
El presidente de Argentina, Javier Milei.

Pese a los conflictos políticos de sus opositores, Javier Milei consiguió el «déficit cero» en las cuentas argentinas. Un logro que no se veía desde el 2008. Este es el resultado de los efectos ‘motosierra’ y ‘licuadora’. 

El presidente de Argentina, Javier Milei, celebró el logro del «déficit cero», objetivo clave de su plan de ‘shock’ y que ha conseguido gracias a un ajuste sin precedentes que ha golpeado a la economía real y es fuente de numerosos frentes de conflicto para el Gobierno.

Milei, quien asumió la Presidencia el pasado 10 de diciembre, eligió la cadena nacional de medios para anunciar el resultado de las cuentas públicas en marzo, un dato que usualmente se informa mediante un simple comunicado y una hoja de cálculos Excel.

Una información árida y compleja de entender para la media de los ciudadanos, pero a la que Milei, economista de profesión, decidió colocar el lunes en el ‘prime time’ para resaltar la conquista en pocos meses de gestión de una de sus promesas de campaña.

«Es una hazaña de proporciones históricas a nivel mundial», destacó el jefe de Estado en un mensaje grabado en la sede del Ejecutivo y secundado por su equipo económico.

«Estoy orgulloso de ser anarcocapitalista»: Javier Milei

Al anunciar en diciembre pasado su plan de ‘shock’ para atacar los profundos desequilibrios de la maltrecha economía argentina, Milei prometió cerrar 2024 con superávit fiscal, desde un déficit primario equivalente al 2,9 % del PIB y un resultado financiero negativo del 6,1 % en 2023.

El resultado conseguido en el primer trimestre del año es notable: el superávit fiscal acumulado fue de 3,8 billones de pesos (3.959 millones de euros), equivalente al 0,6 % del PIB.

Y el resultado financiero (después del pago de intereses de la deuda) acumulado fue positivo en 1,13 billones de pesos, equivalente al 0,2 % del PIB, algo que no se lograba desde 2008.

Sin que hubiera un crecimiento de los ingresos en términos reales, el resultado se explica por lo que Milei denomina efecto ‘motosierra’ (recorte neto de gastos) y ‘licuadora’ (gastos que crecen a tasas inferiores a la de la inflación, que fue del 287,9 % interanual en marzo, dando como resultado una caída en términos reales).

Según Milei, hubo más ‘motosierra’ que ‘licuadora’

En la práctica, se concretaron drásticos recortes en términos reales en las transferencias a las provincias, en partidas para educación y salud, parálisis en la inversión en obras públicas, despidos en la Administración pública, importantes recortes en los subsidios estatales al transporte, la electricidad y el gas y jubilaciones ajustadas muy por debajo del salto inflacionario.

La metodología para recuperar el prometido equilibrio en las cuentas públicas ha supuesto al Ejecutivo de Milei fuertes tensiones con los gobernadores de provincias -todos ellos opositores-, que en muchos casos recurrieron a la Justicia contra las medidas de ajuste.

Maestros, personal sanitario y trabajadores públicos van multiplicando sus medidas de fuerza, mientras que la Confederación General del Trabajo, la mayor central obrera del país, se apresta para concretar el 9 de mayo su segunda huelga general contra el plan de ajuste de Milei.

«Este es el último tramo de un esfuerzo heroico que los argentinos estamos haciendo», aseguró Milei, quien alegó que el superávit fiscal es la única vía para acabar con el «infierno inflacionario».

El ajuste, que el ahora mandatario prometió en campaña que recaería sobre la «casta política», lo están soportando las clases de ingresos medios y bajos, con ingresos que han perdido por mucho tranco la carrera contra la inflación, marginando a miles de personas a la pobreza y hundiendo a otros en la indigencia.

Sin poder de compra en los hogares, el consumo se ha desplomado, con una actividad económica en caída por el golpe a la demanda de bienes y servicios.

Pero mientras que los economistas privados proyectan para 2024 una contracción del 3,5 % en el PIB, Milei se mostró el lunes optimista. Afirmó que la recuperación vendrá de la mano de la minería, los hidrocarburos y la agricultura, de la recomposición de los salarios reales y de la inversión privada. (EFE)