El emprendimiento no solo busca ofrecer productos únicos, sino también contribuir a la comunidad.
En el corazón de la creatividad y la innovación, Salomé Alexandra Jiménez Criollo ha dado vida a Salexa, un emprendimiento que fusiona el arte con la versatilidad de la cerámica. La propietaria comparte la inspiradora historia detrás de este proyecto que ha ganado terreno en el mundo de la creación artística.
«Hace aproximadamente cuatro meses, la idea de este proyecto comenzó a tomar forma. Desde la adquisición de los materiales hasta la investigación exhaustiva sobre todo el proceso de trabajo con la arcilla pasó aproximadamente un mes. Pero la semilla de este emprendimiento se sembró mucho antes».
No es solo el resultado del esfuerzo individual, sino una colaboración familiar. Salomé lidera el proyecto, mientras que su hermana Karen Jiménez se sumó a la creación de piezas únicas. El enfoque principal de Salexa se centra en la creación de elementos cerámicos, con especial atención a las macetas y platos.
La génesis de la idea se gestó en la pasión de la emprendedora por la escultura y la cerámica. «Tenía una habitación separada dedicada a mis creaciones de mis clases de cerámica. Un día, mis tías visitaron y quedaron encantadas con las macetas y esculturas. Fue entonces cuando la idea nació oficialmente», comparte la artista.
Salomé, graduada en Artes Plásticas y Diseño en la UTPL, lleva consigo una maestría en Gestión Cultural y Emprendimiento. Su formación académica no solo respalda su habilidad artística, sino que también aporta una perspectiva única al proyecto.
El emprendimiento no se limita a la creación de productos únicos. Se ofrece una experiencia personalizada, con la posibilidad de realizar pedidos personalizados y entregas a domicilio. Los interesados pueden contactar a través del número 0959705599, o a través de Instagram como salexa_art.
Además, va más allá al ofrecer talleres y alquiler de horno de cerámica, brindando un espacio para aquellos vinculados al mundo artístico. Salomé nos adelanta que próximamente abrirán su propio estudio-taller.
Pero el proyecto no solo se trata de arte y emprendimiento personal. “Estamos considerando proyectos enfocados en la comunidad, ofreciendo talleres y colaborando con instituciones como la Fundación Sonrisas o Prendho», afirma, demostrando que Salexa no solo es una marca, sino una fuerza para el bien social.
Con cada pieza única, el emprendimiento no solo transforma espacios con su arte, sino que también deja una huella en la comunidad, redefiniendo el propósito del emprendimiento artístico.