La medida de hecho exige mayor presencia militar y policial en las carreteras. Los transportistas afirman ser víctimas de la delincuencia.
Redacción CARCHI
Más de una decena de tramos viales bloqueados registró la provincia de Carchi durante la primera jornada del paro convocado por la dirigencia del transporte pesado, que hasta las 20:00 del 26 de octubre de 2023 se mantenía activo.
Por la mañana, los bloqueos comenzaron en la Panamericana Norte, en el sector del Obelisco, así como en la ruta que conecta a Tulcán con Julio Andrade.
Al avanzar la jornada, más lugares fueron cerrados a la circulación vehicular. Se quemaban llantas o se cruzaban camiones y tráileres como parte de la protesta.
Hasta el cierre de esta edición (19:30), los bloqueos registrados se ubicaban en las vías que conectan a El Chical – El Carmen (Jijón y Camaño), Bolívar – Piquiucho, San Gabriel – Bolívar, Huaca – San Gabriel, Julio Andrade – Huaca, Julio Andrade – El Carmelo, Tulcán – Julio Andrade, Panamericana Norte – Obelisco, Tulcán – Rumichaca y Puente Internacional de Rumichaca.
Los pedidos
Pablo Cerón, presidente de la Asociación de Transporte Pesado del Carchi, señaló que el principal motivo de la paralización es exigir al Gobierno mayor presencia policial y militar en las carreteras. Afirmó que a diario son víctimas de la delincuencia.
La tarde y noche del 25 de octubre, los transportistas mantuvieron reuniones con representantes gubernamentales, así como diálogos al siguiente día, donde habrían ofrecido un documento que garantice el cumplimiento de sus exigencias, sin embargo, hasta las 20:00 de ayer, no lograron ningún acuerdo con firma de responsabilidad.
“El Gobierno emitió un comunicado en el que informaban prácticamente de las actividades que han venido realizando como Policía y Ejército, pero esos resultados no se han visto reflejados en la realidad de los transportistas”, comentó.
Según Cerón, lo que esperan de los entes gubernamentales es un documento en el cual se plasme el compromiso firme de que los operativos viales de la Policía y el Ejército van a ser permanentes.
“No puede ser que tengamos la conformidad de decir que se van a hacer dos operativos a la semana, de manera aleatoria, tomando en cuenta que la delincuencia trabaja todos los días del año, las 24 horas al día”, refirió.
Resaltó que los camioneros se sienten abandonados por parte de las autoridades frente a la delincuencia que los acecha, pues se cometen unos 10 robos diarios contra los transportistas.
Acerca de los ataques de las bandas criminales, relató que suceden a cualquier hora. Los delincuentes secuestran tanto al conductor como a su vehículo y la carga.
“Se adelantan en una camioneta, un automóvil o una moto. Bajan las ventanas y sacan sus armas, obligando al conductor a detenerse. Lo someten, apagan el celular y secuestran el vehículo con todo conductor. Esta parte dura aproximadamente tres minutos”, comentó.
“Luego obligan al conductor a que entregue claves de tarjetas de débito, de crédito, banca virtual. Desbaratan el tablero del vehículo para evitar el rastreo satelital. Luego devuelven el celular para que llame a los familiares, quienes se someten a todas las exigencias de los delincuentes y es ahí que pagan sumas de dinero desde $1.000 a $15.000 para liberar al conductor, dependiendo del análisis del número de cédula”, añadió.
Según refirió Cerón, luego de liberar al conductor secuestrado viene un nuevo cobro por liberar el vehículo de carga pesada. Cuando las víctimas denuncian a la Policía o Fiscalía, los delincuentes queman o destruyen los carros.
“Este tipo de robos se dan de 5 a 10 diarios en el eje comprendido entre Santo Domingo y Huaquillas, prácticamente. En este tramo de aproximadamente 400 kilómetros sucede todo esto. Antes elegían marcas específicas para robarse, pero hoy no importa la marca, la capacidad. Hemos puesto denuncias en la Fiscalía, donde el número de denuncias no coincide con el número diario de robos, por obvias razones, porque los conductores prefieren guardar silencio a tener represalias de delincuentes que ya poseen todos sus datos personales y familiares”, explicó.
Afectados por el cierre de vías
Los bloqueos de los transportistas causaron los primeros estragos en diferentes sectores de Carchi y la frontera entre Ecuador con Colombia, donde el Puente Internacional de Rumichaca se ve afectado por el paro.
Sectores comerciales y productivos han manifestado su inconformidad con la medida, pues las salidas y entradas a Carchi prácticamente están cerradas, lo que también implica el cierre del paso fronterizo.
Quienes intentaron viajar dentro y fuera de Carchi señalaron que fue necesario hacer trasbordos para llegar a sus destinos, sobrepasando los bloqueos de vías a pie, usando vehículos particulares que cobraban hasta $20 por persona para cubrir pequeños tramos.
Comerciantes de lácteos y de productos agrícolas también aseguran que las pérdidas por este tipo de paralizaciones son incalculables, pues dependen de la venta diaria de su producción, caso contrario se echa a perder.
Desde las 09:30, en el ECU-911 de Tulcán, se desarrolló una reunión de seguridad, a fin de analizar la situación de la provincia por la jornada de paralización.