La existencia de un nuevo descubrimiento más parece ser una nueva fechoría al más alto nivel como la noticia internacional de contratos en la embajada del Ecuador en España, afín al correismo. Y se supone que podría estar salpicando al partido Podemos. Las noticias hablan de asesorías jurídicas y psicosocial a migrantes ecuatorianos con responsabilidad de ex cancilleres y ex embajadores en cuyas gestiones se suscribieron sendos contratos.
En esta trama aparece el nombre de Jaramillo Mena, como un migrante ecuatoriano olímpicamente firmando como representante de tres contratos. Se ha rumorado en el país, con cierto grado de certeza que este modus operandi ha sido común y corriente en algunas embajadas, de tal manera que obliga a la justicia a efectivizar una investigación para tener la certeza que obraron correctamente.
Las noticias periodísticas determinan que los contratos de asesoría de la embajada ascenderían a siete millones de euros, un poco más de diez millones de dólares.
Vistos estos elevados contratos invertidos en soluciones a los problemas de migrantes ecuatorianos puede deducirse con una simple mirada que habría existido un exceso de gastos que no cuadran con la realidad y que existiría como un supuesto que deja la posibilidad abierta para pensar que el dinero utilizado pudo haber sido aprovechado por una trama especialísima que sirvió para solventar problemas de otra índole en el campo de la corrupción y que esta práctica posiblemente no sería única en la embajada de España en donde parecería que se hizo uso indiscriminado de valores que pudieron haber solventado muchos problemas, de tal manera que resulta como un imperativo no postergado, una investigación sana y radical para conocer de manera precisa en qué se utilizaron estos millones de dólares.