Feriado seguro, con poca presencia de turistas

ESVIAL, la empresa responsable de la regulación del tráfico en la provincia de Esmeraldas, ha sido señalada por turistas, empresarios y transportistas como la principal responsable de la baja afluencia turística durante los tres días de feriado de Semana Santa.

Según diversos actores turísticos y hoteleros de la provincia, factores como el mal estado de las vías, falta de promoción turística, deficiencia en servicios básicos y controles exagerados por parte de los agentes de tránsito de ESVIAL, han contribuido a este escenario.

En lugares como Same, Tonsupa, Mompiche, Las Peñas, Las Palmas y Súa, se reportaron porcentajes bajos de turistas, lo que ha generado indignación entre la población local. Los conductores se han quejado de los constantes acosos por parte de los agentes de ESVIAL.

Las denuncias de chantajes por parte de los agentes de tránsito hacia turistas y conductores han aumentado, causando malestar y afectando la reputación de ESVIAL a nivel nacional.

A pesar de los intentos por mejorar la situación, los problemas persisten y se espera que las autoridades tomen medidas para fortalecer un turismo seguro y sin inconvenientes.
Sin embargo se resalta la gestión de los operativos y controles de seguridad por parte de la Policía Nacional y las fuerzas Armadas en la provincia reportando un bajo índice de delincuencia y terrorismo.

Los operadores turísticos cada que llega un feriado fijan sus esperanzas en lograr los recursos económicos para suplir sus necesidades, sin embargo también los turistas tienen muchos reclamos por la exageración de precios y la cantidad de alimentos que según sus denuncias cada vez dan menos comida por más dinero.

La provincia de Esmeraldas , debe esforzarse por ser eminentemente turística, no basta tener las playas más hermosas, se debe educar y desde los diferentes gobiernos seccionales invertir en los operadores turísticos en proyectos viables de turismo comunitario. La industria tiene mucho que dar a los esmeraldeños, volvamos la mirada al turismo y soñemos con un desarrollo de largo aliento. EGC