Codicia

Rocío Silva

La pirámide financiera de ‘Don Naza’, que tiene dos aristas, la de los estafadores y la de los estafados, quienes convergen en la codicia; ha generado muchas explicaciones de corte sociológico y antropológico, que apuntan hacia la desconfianza en las instituciones bancarias y al deterioro económico producto de la pandemia, como circunstancias que impulsan a la proliferación de estas estafas.

Estas explicaciones intentan justificar la codicia, se busca normalizar esa condición humana que  bloquea la capacidad de reflexionar sobre los riesgos posibles que estas ofertas pueden traer,  no se mide consecuencias, mucho menos se pone en duda el origen de los dineros, o se cuestiona la idoneidad del protagonista visible, en este caso el exmilitar Miguel Nazareno; el conflicto que empieza a emerger con esta situación, hay que ubicarlo en el contexto político, social, étnico, cultural; pues, llega a la confrontación de realidades dentro de colectividades, derivadas de la interacción cotidiana.

Los esquemas de operación de estas actividades fraudulentas son los mismos, empiezan por camuflarse en una aparente legalidad, en el caso de ‘Don Naza’, se recurre a unos recibos impresos con un número de RISE, que nada tiene que ver con operaciones financieras; mientras tanto, se promueven con los beneficios derivados de la compraventa de productos, entonces ‘Don Naza’ habla de venta de artículos de línea blanca, víveres y explotación maderera. Se sustentan con la captación de nuevos inversores que pagan la rentabilidad prometida a los antiguos, aparece el milagro de interés del 90% en ocho días, se convoca a través de redes sociales, y se apuntala en dádivas sociales como entrega de comestibles, electrodomésticos y visitas médicas.

La condición psicológica de la codicia puede eliminarse con una política pública dirigida a  la educación financiera, que desarrolle iniciativas predispuestas a determinar una cultura financiera y económica, mediante la cual, los ciudadanos adquieran herramientas, habilidades y conocimientos para toma de decisiones, en pro de la configuración de una producción económica individual coherente con la realidad de satisfacción de condiciones básicas que fomenten la estabilidad  emocional y familiar, aplicable también, a la ola masiva de migrantes hacia Estados Unidos.

[email protected].