Superwoman

Jaime López

Allá por sus su últimos años de presidente Lenín Moreno,  expresó públicamente en una entrevista internacional que “ojalá tuviera yo un mejor pueblo” queriendo explicar de esa manera su incapacidad, empezando porque él mismo era integrante de ese pueblo y que siendo su Presidente nunca debió cometer esa barbaridad. Fue un ladrillo más para construir su féretro porque los demás están ya fabricados y están en las oficina de la Fiscal General Diana Salazar, que pertenece también al pueblo que Moreno quiso denigrarlo. Si nos rasgamos las vestiduras frente al calificativo, puertas adentro, sin salir de nuestras fronteras, tampoco podemos convertirnos en ciegos ignorantes y no estudiar bien la expresión. Que la haya pronunciado el Presidente obviamente es una estupidez, pero eso no puede ser un obstáculo para reflexionar como se debe sobre los valores que tenemos dentro de una sociedad debidamente organizada, en la que empezando, la democracia hace rato que está agonizando  pidiendo la inyección de medicamentos que la salven sobre todo cuando el desarrollo político nos ha llevado a desorientarnos, a debilitar nuestra fe, a seguir con las cantaletas absurdas  como la que “a mí lo que me importa es mi trabajo que es lo que me salva, el resto que se vaya al carajo”, democracia que frente a nuestra realidad política pide que seamos solidarios con nuestros ancestros, y no empecemos por elegir , para integrar la nueva Asamblea, a los mismos que nos llevaron al descalabro, que los protagonistas que surgen de los despojos de sus partidos para inscribir candidaturas, no empiecen sus campañas como la hace el correísmo con su candidata Srta. Luisa Gonzáles a la que le cubren con una capa roja atada a su cuello, estilo de la capa que lucía el Superman de las historietas y películas, seguramente para promocionarle como Superwoman, llevando a su lado un  Andrés Arauz que rueda sobre la tarima como su  fuera  su pista de baile y que seguramente no le servirá de mucho para educarle en confeccionar programas para Gobierno. Que los candidatos  cumplan con la obligación   de  estudiar día y noche sus programas de Gobierno,  porque con toda seguridad los que presentaron para su inscripción solamente les servirán para cumplir su requisito y no cometan barbaridades como la que cometió Jan Topic cuando concurrió al  auditorio de la Universidad Espíritu Santo de Guayaquil y frente a las preguntas que le formularon los estudiantes no respondió la mayoría, y quiso convertirse en interpelador. Sí, nos queda seguir siendo todavía el pueblo que somos, pero somos también altivos para mejorar cada día.