¿Embajada o guarida?

¿Embajada o guarida?
Eddy Arrobo Rodríguez

Eddy Arrobo Rodríguez 
A raíz de lo ocurrido en la Embajada de México la noche del pasado viernes 05 de abril del año en curso, en la capital de la República del Ecuador, se vierten una serie de comentarios sobre la violación de  la inmunidad diplomática al entrar por la fuerza para realizar el arresto del exvicepresidente Jorge Glass Espinel, el cual se encontraba refugiado en dicha embajada desde el mes de diciembre y sobre el cual pesan sentencias en firme por los casos de corrupción como “Odebrecht” y “Sobornos” y tiene una orden de prisión por el delito de peculado en el caso “Reconstrucción de Manabí”.

Siguiendo este hilo, vale recordar que el rol de las embajadas y consulados es representar a los gobiernos de sus respectivos países, ante las autoridades de otras naciones, garantizando el desempeño eficiente y eficaz de sus misiones oficiales, promover las relaciones bilaterales, dar protección y asistencia a sus ciudadanos, prevenir conflictos, buscar y fomentar la cooperación internacional;  más no, conceder asilo a personas que al tiempo de solicitarlo se encuentren inculpadas o procesadas ante tribunales ordinarios competentes, ya que estas no son guaridas, ni sirven para dar protección a delincuentes ni criminales.

La verdad irrefutable es que la invasión a la embajada mexicana fue un acto bochornoso e ilegal que tendrá repercusiones en la diplomacia internacional, pero, por otro lado, es irracional que una embajada obstruya la aplicación de la justicia ecuatoriana al brindar protección a una persona condenada y con pena privativa de libertad por la justicia ecuatoriana.

Lo que se colige es que la inteligencia ecuatoriana conoció del riesgo real de fuga del “Huésped ilustre” de la embajada, razón por la que las autoridades tomaron la dramática decisión de irse en contra de los Tratados de Derecho Internacional, por sobre darle esperanzas a un pueblo que no quiere vivir de rodillas ante el crimen organizado, que clama por justicia y castigo.