Los sucesos sangrientos, son fruto de la siembra del narco-terrorismo durante la década infame 2007-17 en la que se destruyó el sistema de seguridad antiaérea, se atemorizó y corrompió a los mandos, se restó capacidad operativa a la fuerza pública, se eliminó la Base de Manta, se desarmaron servicios secretos del Estado, se delató a oficiales de inteligencia que realizaban acciones antidrogas, se estimuló la «lucha de clases» entre oficialidad y tropa, se redujo sanciones a narcotraficantes, se impuso tabla de consumo de drogas, propiciando el micro tráfico, se oficializó relaciones con el narco-terrorismo a través de las FARC, ELN y el eje Irán-Cuba.
Cosechamos lo que sembró el mayor canalla antipatria y ladrón de nuestra historia. No lograremos salir del caos generado por el narco-comunismo, mientras no caractericemos a Ecuador, como narco-Estado instaurado por Constituyente; mientras no califiquemos el sicariato, los saqueos, destrucciones, incendios, masacres, como actividades vinculadas al narco-terrorismo. Si seguimos tratando como delincuencia común, estas manifestaciones terroristas, la desadministración de justicia procesará a la fuerza pública, por violación de DDHH, y absolverá a terroristas y guerrilleros urbanos, considerándolos «víctimas de la inequidad social». Lasso debe erradicar esta ignominia.
Urge Consulta, para eliminar la estructura del narco-Estado con las preguntas aprobadas por la CC en Dictamen 7-19-RC-19. Por supervivencia hay que reformar el COIP, para que no cometa infracción quien mata o hiere en defensa de su integridad personal, de otra persona o de sus bienes propios, ajenos o públicos. Impostergable organizar en las ciudades, Frentes de Defensa de la Libertad.
Inaplazable autorizar el porte y uso de armas a ciudadanos sin antecedentes penales, no vinculados al comunismo, ni al narco-terrorismo. Estamos en guerra, el enemigo es interno. Si Lasso y la fuerza pública no reaccionan rápido, con energía, el narco-terrorismo los rebasará, se tomarán ciudades y el Estado por ineptitud, habrá dejado en indefensión a los ecuatorianos.