La Asamblea que viola hasta derechos

José Alvear

Los ‘distinguidos’ padres de la patria son pura vergüenza. Lastimosamente nuestros legisladores, con sus actuaciones diarias, nos traen a la memoria a los payasos del circo, pero dejaron incluso de dar risa para causar indignación, enojo, frustración y mal ejemplo.

Si pensábamos que teníamos 137 inútiles en el circo, con sus pocas excepciones, hoy a la lista de vagos, corruptos, expandilleros, mercaderes, lobistas etc., se suman un presunto violador y un presunto virulento golpeador.

El asambleísta Peter Calo, presunto violador, deberá llevar grillete electrónico. Esto luego de que una jueza dictaminó medidas cautelares, entre ellas la retención de 400 mil dólares, porque al parecer habría citado a una mujer de 19 años para hablar de trabajo en un hostal y después habría abusado sexualmente de ella. La judicatura hizo lo contrario a lo que la lógica y sentido común dictan y lo dejó libre, pese a que la Fiscalía que pedía prisión preventiva aseguró que apelará la decisión. Pero calma país, que la justicia ‘actuó’ y este legislador va con grillete (el chiste se cuenta solo).

Es lamentable ver que un grupo de asambleístas cegados por sus apetitos de poder hacen espíritu de cuerpo, incluso con temas tan graves como el de una presunta violación, con tal de alcanzar los 92 votos ‘de oro’ para censurar al presidente y tomar el poder. Para ellos, por encima de este vergonzoso acto está la misión de romper la base democrática a las malas.

A eso se le suma algo más lamentable: el silencio cómplice de las asambleístas. Sí, esas mismas que aseguraron que fueron a Irán a “reivindicar los derechos de las mujeres” y que apoyaron a un régimen que viola sus derechos. Dan asco.

Hoy también salta desde la bancada de Pachakutik, el movimiento indígena, otro presunto ‘varón’ golpeador y virulento: Rafael Lucero. Sí, el mismo que le rindió un homenaje con una ceremonia ancestral a Guadalupe Llori cuando fue electa presidenta del parlamento, por ser una mujer luchadora. Este mismo ‘varón’ fue denunciado hace poco por su expareja, que en redes sociales lo acusó de agresión física y psicológica hacia ella y también a su pequeña hija. Por esto se le abrió una investigación en la Fiscalía.

Los ecuatorianos estamos cansados de esta vergüenza de representantes. Es momento de caminar hacia días prósperos en cuanto a la productividad, la calidad moral y la ética de nuestros líderes. Ese camino es el camino libertario, porque nos garantiza que todos somos iguales ante la ley, incluso los políticos de turno. Ese modelo nos garantiza una justicia transparente, en la que la casta de políticos no puede meter sus garras, es incorruptible, imparcial y eficiente. Eso es lo que exigimos los ciudadanos.

Recordemos que los votantes somos los únicos que podemos cambiar el rumbo del país en las urnas, eligiendo funcionarios decentes que tengan la consigna de servirnos y no servirse a ellos mismos, a sus familias, a sus amigos, a sus amantes.

Estamos obligados a censurar a esta casta de políticos y trabajar por un Estado menos corrupto y por la anhelada libertad.