Países hermanos

Franklin Barriga López         

Los últimos acontecimientos han generado informaciones difundidas a nivel internacional que no benefician a nuestro país.

En ‘La Estrella de Panamá’ (13-01-2024), Luis Miguel Blanco Bonilla, con el título “¿Panamá está en riego como Perú o Ecuador?”, escribió: “¿Se imagina a un popular presentador de la televisión panameña boca abajo, con el cañón de una pistola en la nuca y transmitiendo en directo? ¿O que le llegue por redes sociales el video de la ejecución con un tiro en la sien de un custodio de la Gran Joya y que salgan despavoridos cientos de jóvenes estudiantes del campus universitario huyendo a los disparos de sicarios enmascarados?

Constan, asimismo, estos otros renglones un tanto xenófobos: “Tanto en Ecuador como en el Perú se ha generado una mafia de extorsionistas que piden la ‘vacuna’ (coima) a figuras públicas y a comerciantes, bajo amenaza de muerte, algo de lo que no se habla mucho en Panamá, pero que indudablemente tiene inspiración foránea (…) El Servicio Nacional de Migración de Panamá da cuenta que en el 2023 entraron 84.654 ecuatorianos y salieron 77.191, o sea se quedaron 7.463. Podría considerarse que unos 10 mil han hecho de este país su nuevo hogar permanente”.

Los vínculos, profundos y fraternales, entre Ecuador y Panamá o viceversa datan de siglos. Las generalizaciones como las anotadas hacen daño, de allí que es preciso relievar los nexos históricos y actuales, incluso familiares, de los habitantes de ambos países hermanos, tradicionalmente cordiales, especialmente en el comercio y el turismo.

Tanto en Panamá como en Ecuador existen personas que actúan al margen de la ley y que son combatidas, como se está haciendo y con mano dura en nuestra Patria que está atravesando –cierto es- momentos difíciles pero que serán superados, para volver a ser isla de paz, hospitalidad y trabajo para no pocos extranjeros.